Curar el cáncer: cómo ayudan la compañía y la risa

COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - Los Amigos de Pacientes Oncológicos (APOD) se reúnen en el Centro de Día Oncológico del Hospital Regional para acompañar en el proceso del tratamiento a pacientes con cáncer. Calmar, alentar y hacer reír: las claves del éxito que apuntalan los tratamientos. En Comodoro, hay equipo. Conocelo.

En cuanto al proceso de acompañamiento de pacientes oncológicos, Graciela Cifuentes explicó que se trata de “asumir de la mejor manera ese momento tan difícil que por ahí les toca, pero teniendo en cuenta que todo se puede y que con tiempo se puede curar. Lo importante es prevenir y tomar medidas con tiempo”.

Destacó la importancia de “tomar conciencia en este día de lo que es el cáncer y los cuidados que tenemos en manos poder hacer”. Este año “el lema es al alcance de todos. La responsabilidad es de todos para tener menos muertes por cáncer”, indicó.

Mientras tanto, otra de las amigas de pacientes oncológicos, Mabel Blanco, explicó en diálogo con Canal 9: “Podemos tener una vida sana, dejar de fumar, cuidarnos del sol para evitar un cáncer futuro, hacer los controles que corresponden y, desde los gobiernos, dar los medios y asegurar un tratamiento oportuno, que sea lo antes posible, y facilitarles los medios para o curar o prevenir el cáncer”.

LA RISA CURA

Los enfermeros payamédicos también cumplen un rol más que importante en el proceso de contención de pacientes con cáncer, inyectándoles ánimo para seguir con el tratamiento y ciudados paliativos.

“La risa cura o acompaña –destacó Lidia Oviedo, payamédica-.  Al principio les causa sorpresa tanto color y quiénes somos; no todos nos conocen. Después nos van conociendo y nos extrañan”.

Levan Macharashvili, otro colaborador de APOD, destacó: “se dice que el ser humano es emoción, espíritu y cuerpo. Los médicos deben encargarse del cuerpo sin dejar que el espíritu se quede libre y nosotros trabajamos desde el amor, la compasión. La palabra cáncer siempre genera miedo”.

“Acompañamos al grupo familiar porque siempre se enferma la familia; intentamos llevarlos por un camino de tranquilidad, un espacio de meditación, de pensar que todo se puede”, destacó.

La enfermera Mónica Áreas, en tanto, explicó que “estamos constantemente con ellos, desde que empiezan hasta que terminan” el tratamiento. “Somos cuatro enfermeras, psicólogo, asistente social, secretaria, dos doctoras. El acompañamiento también es hacia afuera. Nos llaman o mandan mensajitos”.

Fabiana Marcial, enfermera, dijo que lo importante es “tomar conciencia de que uno puede prevenir, cambiar de hábitos, comenzar con pequeñas cosas como la ingesta de agua y dejar los malos hábitos, hacer deporte”.

“Es muy bueno poder estar con ellos, acompañar y que hay muchas cosas que pueden ir logrando”, agregó.

Finalmente, el psicólogo Juan Cruz Yapura, resaltó la necesidad de que el paciente empiece a “priorizar las cosas que tiene a su alrededor, la compañía de sus seres queridos, empezar a ver las cosas desde otro lado y con otro sentido”.

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