De Comodoro a París: el cervecero local que participará de un vernissage en el Museo del Louvre
Se trata de Pablo Báez, un emprendedor local que en octubre tendrá un stand en el Museo del Louvre con su marca de cerveza artesanal denominada "KM5", en homenaje a su ex barrio.
Pablo Baéz tiene 37 años y llegó a Francia en 2015. Meses después abrió una cervecería llamada "KM.5", en homenaje a su barrio natal. Pablo vivió en Mendoza y México, donde conoció a su esposa, que es francesa.
Cuando llevaban un tiempo casados decidieron probar la vida en el pueblo natal de ella, y se fueron a Francia. Actualmente viven en Génissac, cerca de Burdeos, un pueblo de 2 mil habitantes.
En octubre Pablo tendrá un stand en el Museo del Louvre en París y participará en un vernissage con su marca de cerveza artesanal.
"KM5" se produce en una zona de viñedos cerca de Burdeos, en el sur de Francia; se distribuye en restaurantes, bares y cavas de la región, y ahora llegará a París. Desde el 2018, Pablo cultiva su propio lúpulo: hoy cuenta con cinco variedades y produce ocho tipos de cerveza. Báez también llevará la cerveza KM5 al Salón Internacional de la Agricultura en París.
Según destaca Metadata Noticias, Pablo es pionero en el cultivo de lúpulo en la región y descubrió que podía desarrollar diversas variedades aprovechando las especies autóctonas de la costa ribereña. Esto llamó la atención de los especialistas franceses que no tardaron en conocerlo.
"Hay un especialista, que es el más conocido en Francia, al que le encantó mi manera de cultivar el lúpulo y mis ganas de aprender. Yo quería que las universidades de acá empiecen a estudiar la genética del lúpulo para poder crear nuevas especies", indicó Pablo.
El mercado de la cerveza artesanal se encuentra en plena expansión en Francia y otros países de Europa. En las afueras de París se realizan festivales de música y gastronomía que convocan unas 4.000 y 5,000 personas.
"El francés apoya mucho al comercio local. En la actualidad cada vez hay más demanda de cerveza artesanal. Las cervecerías chicas ya se están volviendo grandes. Empezás a ver sus cervezas en los supermercados o en casi todos los bares. La mayoría ya tiene su bar propio", señaló Pablo.
Actualmente Pablo combina su emprendimiento cervecero con su afición por la historia y el arte. Ya organizó una exposición de fotos de las décadas del '20 y el '30 con material que le proporcionó un poblador de la región. Ahora Báez tiene en mente abrir un restaurante con un espacio de exposiciones para artistas argentinos.