El viento provocó inconvenientes durante toda la jornada del viernes, pero fue durante la noche y madrugada de este sábado cuando alcanzó su mayor intensidad y las llamadas a Defensa Civil se multiplicaron.

Durante varias horas, el viento sopló a más de 120 km/h, alcanzando una intensidad máxima de 144 km/h, lo que mantuvo en vilo a la ciudad. No hubo un sector donde las rachas de viento no ocasionaran algún inconveniente.

Ramas desprendidas y árboles completos caídos sobre las veredas, las calles, e incluso golpeando algunas viviendas. Postes quebrados, cables cortados, algunos de ellos de energía eléctrica flameaban por el viento desparamando chispas. Se rompieron portones, se volaron techos, se cayeron muros -como el perimetral del Cementerio Oeste- y estallaron vidrios de locales comerciales, edificios y viviendas

Para este sábado el Servicio Meteorológico Nacional pronostica vientos de hasta 124 km/h durante la mañana, disminuyendo a casi 90 a lo largo del día.

En Comodoro el viento sopla fuerte durante todo el año, tal como sucedió este viernes. Sin embargo, la historia cuenta que un día de 1968 sopló más fuerte que nunca y provocó grandes destrozos, desde voladuras de casas hasta paredones. Los diarios locales aseguran que las ráfagas alcanzaron los 240 kilómetros por hora.

Si bien los problemas se acentuaron por la noche cuando las ráfagas se hicieron más intensa, dejando incluso a todo Comodoro y Rada Tilly sin luz por unas 3 horas, los inconvenientes comenzaron más temprano, como señaló el intendente Juan Pablo Luque en su cuenta de Twitter.

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Tweet de Juan Pablo Luque
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