Descubren que el origen de los perros viene de dos poblaciones de lobos
Genetistas y arqueólogos descubren que la ascendencia de los perros proviene de dos grupos distintos de lobos de la Edad del Hielo.
Una investigación de genetistas y arqueólogos dirigida por el Instituto Francis Crick descubrió que la ascendencia de los perros deriva de como mínimo dos poblaciones de lobos antiguos.
El estudio, que se publicó en la revista internacional “Nature”, implica un avance en lo referente al misterio que representa la domesticación de los perros, pregunta que no sigue desde la prehistoria.
En la Edad del Hielo hace 15.000 años, comenzaba la domesticación de los perros de la mano del lobo gris. Pero no sabemos en que parte del mundo ocurrió. En el análisis se estudiaron 72 genomas de diversos lobos de los últimos 100.000 años de Europa, Norteamérica y Siberia.
Participaron arqueólogos de 16 países y nueve laboratorios de ADN antiguo trabajaron en los datos de secuencias de ADN de los lobos. Allí se pudo ver que los perros primitivos y modernos se parecen a los lobos antiguos de Asia. Pero, además, encontraron pruebas de que dos poblaciones de lobos aportaron ADN a los perros.
Los primeros perros de Siberia, América y noreste de Europa tienen un origen compartido de occidente y los de África, sur de Europa y Oriente Medio tienen ascendencia de lobos de Oriente medio. Esto puede indicar que los lobos se domesticaron más de una vez por distintas poblaciones mezcladas.
Actualmente el equipo de genetistas y arqueólogos sigue buscando un ancestro dentro de los lobos para los perros. En la investigación se pudo también construir una línea del tiempo sobre el cambio en el ADN de los lobos porque se incluyeron 30.000 generaciones.
Así es como descubrieron que la variante de un gen que interviene en los huesos del cráneo y la mandíbula pasó, en un periodo de 10.000 años, de ser un gen muy raro a estar presente en todos los lobos y seguir presente en la actualidad en todos los perros y lobos.
Mediante esta escala temporal de ADN el equipo buscó hacer un análisis sobre el desarrollo de la evolución de los lobos y posteriormente los perros a tiempo real, en vez de intentar reconstruir la historia a través de un ADN actual.
El equipo de investigación seguirá buscando con mayor exactitud un ancestro de los perros, que demuestre el lugar en el mundo en el que comenzó la domesticación. Razón por la cual comenzarán un estudio centrado en genomas de otras partes del mapa no incluidas en este estudio.