Deterioro en las 232 viviendas: los vecinos irían a la justicia
Aseguran que debido a la humedad y los hongos hay abuelos y chicos con “neumonía y bronquiolitis”.
COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) – Vecinos de las 232 viviendas de Ciudadela intimaron al delegado del IPV, Daniel Carrizo, debido a la situación en la que se encuentran sus viviendas tras el temporal que azotó a la ciudad hace tres meses atrás. Gabriela Sosa, una de ellas, explicó que tienen “humedad y hongos en las paredes, grietas y rajaduras”. Además, manifestó que hay abuelos enfermos y chicos con “neumonía y bronquiolitis”. Días atrás, habían cortado la ruta. Mirá el video de ADNSURTeVé
“Estamos intimándolo al señor Carrizo para que nos dé soluciones sobre el deterioro de las casas. Tras el temporal y anteriormente también se habían empezado a ver falencias en las viviendas, grietas, rajaduras en las paredes, humedad y después se empezó a notar más. Ya tenemos hongos en las paredes. Podemos hacer un jardín en las habitaciones”, relató.
Aseguró que “tenemos abuelos enfermos, chicos con neumonía y bronquiolitis. No se puede dormir del olor a humedad que hay y la habitación de debajo de los dúplex es una heladera”.
“Nos reunimos en una oportunidad en el IPV. Nos dieron un juego de planillas para poder hacer el descargo de las falencias en cada una de las viviendas, otra por el tema de las cuotas porque llegaron 300 cuotas de 6 y 7 mil pesos y otra por el tema de la mensura porque no están mensurados los terrenos. Tenemos que compartir impuestos con el vecino, no tienen las medidas reglamentarias; que debería haber aprobado la municipalidad. Hay 2 o 3 casas en un solo terreno”, dijo.
“Venimos hace tres semanas firmando planillas; todavía no tenemos ninguna respuesta. Dijeron que iban a enviar cuadrillas y arquitectos y peones para que arreglen las casas; creo que se vieron a gente de Rigel en las casas pero así como las arreglaron volvieron a romperse en 48 horas”, resumió.
También reclamaron por el estado de la subcomisaría, donde “los agentes no tienen gas. Prometieron hacer un tinglado para las motos y no se ve nada. Hay muchas cosas por hacer en el barrio; las veredas de las casas están partidas. Los dúplex están hechos sobre plateas, no tienen base”, dijo otro de los vecinos, Juan Velázquez.
Mientras tanto, Franco Romano reclamó que las autoridades “vinieron a sacarse fotos y no ponen el medidor de gas a la policía. Son seres humanos y ellos nos están cuidando. Gracias a ellos se ha calmado bastante el barrio”.