Devolución de áreas de YPF en Chubut: Reunión clave con Marín y el esquema de traspaso entre privados que podría aplicarse
Salvo Manantiales Behr, tanto Campamento Central-Cañadón Perdido como Escalante-Trébol presentan números de producción en baja y muy poca actividad para revertir esa tendencia.
Tras el reclamo que hizo el gobernador Ignacio Torres para que YPF incremente su actividad en Chubut, bajo la advertencia de que podría iniciar un proceso de reversión, el flamante titular de la petrolera de mayoría estatal respondió que no habría inconvenientes en esa devolución, mensaje que también hizo llegar al gobernador santacruceño, Claudio Vidal.
A partir de esa circunstancia, las partes quedaron en reunirse para dialogar con mayor precisión y acordar un esquema de traspaso, en el que eventualmente la petrolera comunicaría cuáles son los yacimientos en los que dejará de invertir y estaría dispuesta a ‘devolver’, aunque no se trataría precisamente de un proceso de reversión.
Según pudo saber ADNSUR, un esquema de reversión de áreas, es decir de “quita” por parte del Estado provincial en perjuicio de la operadora, implicaría un proceso de varios meses, con análisis de pasivos ambientales y otras auditorías que motivarían una paralización de actividad mientras ese proceso se lleva adelante.
Por otro lado, fuentes cercanas a la industria aseguran que, en estricta aplicación de la normativa vigente en torno a las concesiones, en Chubut no habría sustento legal suficiente para una reversión, ya que los indicadores de actividad de la operadora, aunque no son óptimos, estarían dentro del cumplimiento de los compromisos asumidos al momento de la prórroga de concesión.
En cualquier caso, en despachos oficiales comenzó a evaluarse un esquema que sería menos complejo y más dinámico, vinculado a un “traspaso entre privados”, en un esquema similar al que se aplicó en su momento con el área de Pampa del Castillo, que Enap Sipetrol vendió años atrás a Capsa, en Chubut.
Un esquema similar se aplicó en el norte de Santa Cruz, en el año 2021, cuando Sinopec traspasó las áreas que operaba en esa región a manos de CGC, la Compañía General de Combustibles propiedad del grupo Eurnekian.
Con ese tipo de operatoria en mente, las autoridades del gobierno provincial esperan conocer también cuál es la expectativa del presidente de la petrolera, Horacio Marín, quien participará de una reunión, el próximo viernes, con el dirigente petrolero Jorge Avila y otros referentes sindicales de la región.
Según pudo saber esta agencia, el propio ejecutivo pidió la presencia del gobernador Ignacio Torres en ese cónclave, para dialogar sobre los planes de la petrolera en la provincia y en la cuenca San Jorge en general, por lo que no sería extraño que también se sume el santacruceño Claudio Vidal.
LAS AREAS QUE HOY OPERA YPF EN CHUBUT Y QUE PODRÍAN CAMBIAR DE MANOS
Hay que recordar que son 3 los bloques principales que hoy tiene bajo su operación YPF en Chubut. Uno de ellos es Manantiales Behr, una especie de ‘estrella’ que la compañía suele mostrar en foros diversos, a partir de los buenos resultados que viene obteniendo en su programa de recuperación terciaria, con notorias mejoras en volúmenes de producción, que han dado buenos rendimientos frente a ese tipo de inversión. Por eso se descarta que esos yacimientos formen parte de la discusión.
Los otros dos bloques, que son Campamento Central-Cañadón Perdido y Escalante-Trébol, en cambio, muestran resultados declinantes en lo que refiere a producción. Tal como informó ADNSUR en diciembre último, ambos bloques se encuentran hoy con niveles de extracción de petróleo inferiores a los de marzo de 2012 (de acuerdo con los datos oficiales de la Secretaría de Energía de la Nación), cuando se inició el proceso de reversión de áreas que terminó con la estatización del 51% del capital accionario de la compañía.
Si la curva de declino puede explicarse en la madurez geológica de los yacimientos, hay otro dato preocupante: en mapas de despachos oficiales se observa con claridad la falta de actividad en esos bloques, donde prácticamente no hay nuevas perforaciones ni otros proyectos para revertir esos resultados, como sí los hubo en Manantiales Behr con las técnicas de recuperación terciaria.
Por eso se cree que, además de Restinga Alí, que es un área marginal y cuyo proyecto exploratorio arrojó resultados negativos, los otros dos bloques formarán parte de las conversaciones de cara a un eventual traspaso “entre privados”, como se define la operatoria en la que una petrolera puede vender a otra la concesión de bloques petroleros.
POSIBLES CANDIDATOS Y PAÑOS FRÍOS DESDE EL SINDICATO
Al influjo de las apreciaciones públicas de los protagonistas, comenzaron a trascender posibles nombres de interesados en quedarse con las áreas que YPF ya no tiene entre sus prioridades en Chubut y Santa Cruz.
“Hay muchas empresas que pueden tener interés en hacerse cargo de la operación”, confiaron desde ámbitos oficiales, donde hay extrema prudencia en relación con los próximos pasos, sobre todo por las cuestiones legales que pueden desprenderse en este tipo de circunstancias.
Los nombres que forman parte de la danza de rumores son, por ahora, sólo eso, pero se desprenden distintas especulaciones en torno a empresarios conocidos de la región del golfo San Jorge, o incluso otros, no tan locales, pero de buenos vínculos con el gobierno de Javier Milei, un nombre surgido del riñón del grupo Eurnekián, al igual que buena parte de sus principales colaboradores.
Por ahora, las proyecciones parecen prematuras. Incluso Jorge Avila salió a poner paños fríos al tema de las áreas, al ser consultado por ADNSUR en las últimas horas:
“Por eso queremos juntarnos con Marín y ahí escucharemos de parte de YPF qué quiere hacer en la cuenca San Jorge, si de verdad quieren devolver las áreas o si es sólo una ‘aventura’, porque YPF ha firmado contratos de 3 (años) más 2 (años de prórroga) con las pymes contratistas y todo eso no es fácil volver para atrás. Nosotros mismos no vamos a permitir que esos contratos vuelvan para atrás”, advirtió el dirigente sindical, quien semanas atrás se había mostrado más entusiasmado con la posible reversión de áreas.
Avila afronta además sus propias tensiones internas, debido a que los afiliados petroleros ya hicieron saber el malestar por la posible reimplantación del impuesto a las ganancias sobre sueldos, tal como anunció el presidente libertario. En su rol de diputado nacional, ‘Loma’ ya anunció que votará en contra de esas iniciativas (aun cuando posiblemente el gobernador Torres la termine apoyando, ante la presión para recuperar ingresos que dependen de ese impuesto), pero no puede sumar elementos de incertidumbre en su ámbito gremial.
Las dudas podrían surgir sobre la base de que una operación a manos de YPF u otra operadora consolidada en la región, no es lo mismo que una operación a cargo de una empresa más chica, que necesite reducir costos, lo que dicho en pocas palabras significaría también menor cantidad de mano de obra en esas áreas. Así lo mencionó también el mismo dirigente semanas atrás, cuando advirtió que era necesario analizar “qué empresa vendrá a hacerse cargo”, recordando los resultados negativos de Capetrol, una compañía a la que YPF traspasó áreas tiempo atrás y terminó con serios inconvenientes.
Por eso será importante el cónclave anunciado para el viernes, para empezar a esclarecer si lo que hay es una intención real de reactivar áreas con indicadores productivos en baja, o si ambas partes están alardeando, como en un partido de truco, con el simple ‘orejeo’ de cartas.