El “hongo negro”, la rara infección que ataca a pacientes con coronavirus
La mucormicosis u “hongo negro” se reportó en la India como una enfermedad asociada al Covid-19, con una tasa de mortalidad del 50%. Actualmente se esparció en varios países del mundo, entre ellos Uruguay.
La mucormicosis es una infección muy rara causada por la exposición al hongo mucor, que es parte de la familia Mucoraceae que se encuentra comúnmente en el suelo, las plantas, el estiércol y las frutas y verduras en descomposición. Esta se ha detectado en las últimas semanas en pacientes con coronavirus, primeramente en la India, para luego expandirse por diversos países a nivel mundial hasta llegar a Uruguay.
El "hongo negro" afecta los senos nasales, el cerebro y los pulmones y puede ser potencialmente mortal en personas diabéticas o gravemente inmunodeprimidas, como pacientes con cáncer o personas con VIH/sida.
Según los expertos, este "hongo negro" puede ser provocado por el uso de esteroides, unos compuestos farmacológicos usados para los tratamientos de pacientes graves o en estado crítico del coronavirus.
Los esteroides reducen la inflamación en los pulmones y ayudan a detener algunos de los daños que pueden ocurrir cuando el sistema inmunológico del cuerpo se acelera para combatir el coronavirus. Pero también reducen la inmunidad y aumentan los niveles de azúcar en la sangre, tanto en pacientes diabéticos como no diabéticos con Covid.
Los pacientes que padecen la infección suelen tener síntomas de congestión y sangrado nasal. También hinchazón y dolor en el ojo, párpados caídos, visión borrosa y finalmente la pérdida de un ojo. Puede haber manchas negras en la piel alrededor de la nariz.
Los médicos dicen que la mayoría de sus pacientes llegan demasiado tarde para ser tratados, cuando ya están perdiendo la visión. Es así que tienen que extirpar quirúrgicamente el ojo afectado para evitar que la infección llegue al cerebro, indicó Infobae.
La mucormicosis no es contagiosa entre personas o animales. Solo se desarrolla en pacientes con las condiciones propicias en su cuerpo, como la diabetes o la inmunodepresión causada por otras enfermedades. Sin embargo, ya que se propaga por las esporas de hongos que están presentes en el aire o en el medio ambiente, es casi imposible evitarla. Una persona sana, o sin problemas del sistema inmunitario no debe temer por un contagio de este tipo.