El hospital de Cipolletti recurre a pediatras jubilados por falta de personal
Cipolletti enfrenta una crisis en la cobertura de vacantes para atención pediátrica, obligando al hospital local a buscar profesionales ya retirados.
En el Alto Valle, la falta de interés entre los nuevos egresados de medicina para cubrir residencias en pediatría llevó al hospital Dr. Pedro Moguillansky de Cipolletti a tomar medidas extraordinarias. De las tres vacantes abiertas para la especialidad, solo un postulante se presentó al examen, obligando a la institución a recurrir a dos pediatras jubilados para mantener el servicio.
El hospital de Cipolletti no es el único afectado por esta problemática, pero sí uno de los más impactados. Según informó Renata Scalesa, coordinadora de Desarrollo de Recursos Humanos de Salud, las vacantes en otras especialidades también muestran una baja cobertura: en clínica médica se presentaron solo 4 candidatos para 11 puestos y en medicina general, 3 para 15. Esta situación refleja una tendencia nacional, donde el déficit en pediatría es alarmante: se inscribieron 33 candidatos para 602 vacantes en todo el país.
El presidente de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), Miguel Indart de Arza, destacó que la situación es grave y puede empeorar. “La pediatría es una especialidad con alta demanda afectiva y de contención, y la falta de pediatras podría generar un problema crítico de salud pública en los próximos años”, afirmó Indart. Además, señaló que muchos de los inscritos en residencias son médicos extranjeros que eventualmente podrían regresar a sus países de origen, lo que agrava la situación.
La falta de interés en residencias no se limita a pediatría. Otras áreas también enfrentan dificultades: clínica médica, medicina general, obstetricia y psiquiatría infantojuvenil, entre otras, muestran vacantes sin cubrir. En contraste, especialidades como terapia intensiva y salud mental han tenido una mayor cantidad de postulantes, aunque aún insuficientes para cubrir todas las plazas disponibles.
Ante esta crisis, el gobierno de Río Negro y otras provincias están implementando incentivos para atraer a los nuevos médicos a las especialidades más necesitadas. Entre las medidas se incluyen reducciones en las horas de guardia, plus salariales y bonificaciones por trayectoria formativa. Sin embargo, la cuestión de fondo sigue siendo la falta de recursos humanos capacitados para cubrir la demanda creciente en el sistema de salud pública.