El youtuber Yao Cabrera irá a juicio oral por trata de personas y reducción a la servidumbre durante una semana
Además la Justicia confirmó el procesamiento a raíz de las denuncias de exempleados: estafas a niños, abusos sexuales y facilitación de la prostitución a menores de edad.
Se confirmó el procesamiento y embargo millonario al youtuber uruguayo Marcos Ernesto Cabrera Rodriguez, más conocido como Yao Cabrera. Todo comenzó en 2020 mientras grababa "La Mansión WiFi" en una casona de Escobar.
La denuncia llegó al juzgado a través de un mail anónimo. Allí decía: “Ese grupo (Yao y colegas) reclutaba jóvenes youtubers e instragramers, y una vez que estaban dentro de esa mansión les solicitaban que debían firmar un contrato en donde debían ofrecer servicios sexuales a personas de distintas partes del mundo, tanto hombres como mujeres, para permanecer en dicho reality".
Distintas personas que trabajaron para el polémico influencer, presentaron pruebas irrefutables sobre los sistemas de diferentes estafas a niños vulnerables, abusos sexuales, corrupción y facilitación de la prostitución a menores de edad, entre otros hechos aberrantes.
Giovanna De Mitole, exdiseñadora de Cabrera, tuvo que pasar varias entrevistas en Cámara Gesell. Ella afirmó que Cabrera la “redujo a la servidumbre” bajo las condiciones de “darle un lugar donde vivir y comer, valiéndose del estado de vulnerabilidad de la joven”.
Fue entre diciembre de 2019 y enero de 2020. A Yao Cabrera y a otros integrantes también los denunciaron que los sometían a su poder y a voluntades precarias.
Además, sus exempleados Giovanna De Mitole y Mariano Fernández “presentaron pruebas irrefutables sobre los sistemas de multiestafas a niños vulnerables, abusos sexuales, corrupción y facilitación de la prostitución a menores de edad”.
Influencer polémico
En 2019, la youtuber Caeli publicó un video en su canal en el que reconstruyó el momento en el que fue drogada y fue víctima de un intento de abuso de parte de Cabrera. Si bien no lo nombró, él se dio por aludido e intentó desmentir las pruebas.
Un año más tarde, Cabrera comenzó una campaña falsa en la que fingió haber sido secuestrado para pedirle una suma de U$D 30.000 en modo “rescate” a los seguidores. Fue divulgado por Instagram, muchas fanáticas y fanáticos juntaron dinero, pero las sospechas causaron revuelo y se reveló que era una estafa.
En ese mismo año fingió ser asesinado por sicarios a través de videos en Youtube donde se ven supuestos asesinos que se acercaban y le disparaban a quemarropa. En el video se puede ver el cuerpo de Cabrera abatido en el asiento del conductor del auto.