En el último año aumentaron un 63% las alcoholemias positivas
En este 2018 se incrementaron los controles vehiculares en las calles de Comodoro Rivadavia, y como consecuencia aumentó el índice de alcoholemias positivas detectadas. En total 280 conductores dieron positivo en el test y tuvieron que pasar por algunos de los tribunales de Faltas de la ciudad. Vehículos secuestrados, índices altos de alcohol, incidentes y ausencia del Estado, características que rodean a una problemática difícil de abordar.
C omodoro Rivadavia tiene un alto consumo de alcohol. En los últimos diez meses ingresaron a la ciudad más de 11 millones de litros de cerveza, vino y otros derivados, y mientras se registró una merma en la compra de alimentos de primera necesidad, se mantuvieron los índices de consumo de alcohol, según pudo confirmar ADNSUR a través de la Dirección de Abasto y Veterinaria y la Subsecretaría de Fiscalización de la Municipalidad.
En torno al consumo de bebidas etílicas se dan diferentes problemáticas y una de las más preocupantes es el conducir en estado de ebriedad.
Según datos de la Secretaría de Control de Operativo, solo en los primeros 11 meses del año se detectó a 280 conductores manejando con alcohol en sangre, es decir un centenar de personas más que las detectadas en el mismo periodo de 2017, cuando se contabilizaron 178.
Para el secretario de Control Operativo Ricardo Murcia, el aumento de la alcoholemia positiva se dio por una sencilla razón: el incremento de los controles. “El incremento es directamente proporcional, hay una mayor cantidad de vehículos controlados y eso te dispara una mayor cantidad de alcoholemias. Esto indica que si nosotros aumentáramos a una mayor cantidad de controles más alcoholemias tendrías, sino no se daría este incremento”, señaló en diálogo con ADNSUR.
UN PELIGRO AL VOLANTE
Las estadísticas indican que junio fue el peor mes del año con 43 infractores que fueron sorprendidos manejando alcoholizados, pese a que agosto fue el mes en que más vehículos se controlaron. El mayor índice de alcohol del año fue de 2.99 gr/litro de sangre.
Según explicó Murcia “la mayor cantidad de alcoholemias se da en la franja etaria que cubre a la gente que sale a bailar, de 22 a 35 años”.
“La gente grande se cuida muchísimo, es la que se toma un remis, la que le dice a la mujer voy a tomar maneja vos o va a un asado y convinieron para que los vayan a buscar. Después de los 35, 40 años la gente se cuida”, agregó.
Lo cierto es cada infractor en mayor o menor medida significa un peligro al volante en una ciudad donde ya murieron 14 personas por accidentes de tránsito en lo que va del año, y a más de 20 días para que termine el año ya se igualó el registro de 2017.
Emilse Cavero, instructora de la Escuela de Manejo Defensivo del IAPG (Instituto Argentino del Petróleo y el Gas) en diálogo con ADNSURTeve el último mes explicó que el exceso de velocidad y consumo de alcohol suele ser un combo fatal. Y los datos parecen darle la razón ya que indican que la mayor cantidad de accidentes de tránsito suelen ocurrir el día domingo por la mañana.
Para poder ejemplificar la magnitud del problema no es necesario retroceder a largo plazo en el tiempo. El 2 de diciembre, hace apenas siete días, un hombre que volvía de la playa volcó en una zanja en el ingreso a la villa balnearia y dio positivo en el test de alcoholemia. Un día antes otro conductor dio positivo en el test luego de que pasó un semáforo en rojo en el sector de La Nación y Roca.
En noviembre, en tanto, un hombre que conducía borracho chocó a un auto estacionado y volcó en Rada Tilly. El conductor del auto le aseguró a la Policía que se había distraído con el celular pero le hicieron el test de alcoholemia y le dio positivo. Y en el mismo mes otro conductor, en un caso curioso, se metió con su camioneta adentro del corralón municipal y le dijo a los inspectores que estaba tratando de encender la unidad.
Casos de este tipo son habituales para los inspectores que a veces se encuentran con conductores violentos que suelen ocasionar incidentes o incluso atacarlos, tal como sucedió a fines de octubre cuando Eduardo Ochoa de 33 años golpeó a una inspectora luego de que fue sorprendido corriendo una picada junto a su padre en pleno de Centro de la ciudad.
Sin embargo, hay casos muchos más graves como él que se ocurrió el 21 de enero de 2015 y se quedó con la vida de Sergio Orlando Faúndez, un conocido canillita de la ciudad que fue chocado de atrás por Brian Smith. El joven conducía con 2,95 gramos de alcohol en sangre y fue condenado a 3 años de prisión en suspenso y se le prohibió conducir durante 6 años.
EL ROL DEL ESTADO
Pero ¿cuál es el rol que cumple el estado frente a esta problemática? Tanto la Municipalidad como la Provincia, a través de la Agencia Provincial de Seguridad Vial de Chubut, realizan controles de alcoholemias; el organismo local en la ciudad y el provincial en las rutas.
En lo que concierne a las calles de Comodoro Rivadavia se realiza un control por día los fines de semana. Esto a partir de la cantidad de empleados de tránsito disponibles y las herramientas con lo que dispone el área.
Los inspectores siempre están acompañados por personal policial y un médico para que certifique el control de alcoholemia. Y cuando se sorprende a un conductor en estado de ebriedad se multa al dominio.
El costo de la infracción es de hasta 60.000 pesos, pero puede variar de acuerdo al Tribunal de Faltas que reciba la multa y si existen atenuantes que puedan aumentar su valor, como por ejemplo, haberse intentado dar a la fuga lo que conlleva varias infracciones: exceso de velocidad, evasión de un control, maniobras peligrosas y en algunos casos semáforo en rojo. De esta forma, el valor que costará la multa dependerá en cierta forma de la fecha en que se labre la misma, eso determinará que juzgado tendrá la infracción y el criterio del juez.
En este sentido, vale destacar que algunos jueces obligan al conductor a realizar un curso de Educación Vial. Sin embargo, sobre este punto hay una falencia, ya que en la ciudad no existe ningún organismo que brinde un curso específico que apunte a concientizar al conductor sobre el peligro que conlleva conducir alcoholizado y las consecuencias de este tipo de accidentes.
Para modificar este vacío disciplinario en los últimos meses la Municipalidad presentó un proyecto de ordenanza que establece la implementación de un curso obligatorio de concientización vial, que tendría un costo de 2.500 pesos.
Junto a ese trabajo también se presentó un proyecto para que en la ciudad se aplique Tolerancia Cero de alcohol al volante, tal como se realiza en ciudades de Chile.
De esa forma se eliminará la barrera vigente que en sintonía con la Ley Nacional de Tránsito tolera hasta 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre en el caso de los conductores particulares.
Sin embargo, la pregunta que se hacen todos es si disminuir el margen ayudaría a concientizar para evitar este tipo de infracciones, o solo aumentaría la cantidad de infractores y por ende la recaudación municipal, números más que interesantes teniendo en cuenta la cantidad de infractores pero que no vuelven en materia preventiva.
Por el momento resta ver que hará el Concejo Deliberante con esos dos proyectos. Mientras tanto, desde el área de Control Operativo evalúan otros mecanismos que ayuden a prevenir la intoxicación al volante. “Hay un aparato que queremos traer que te permite medir consumo de drogas no permitidas. Es por hisopado de saliva, pero todavía hay que ver algunas cuestiones legales”, admitió Murcia en este sentido, asegurando que la Tolerancia Cero sería la mejor manera de prevenir más muertes.