Este domingo es el Día Nacional del Pago Igualitario, una jornada para reflexionar sobre la brecha salarial por género
¿Sabías que Comodoro y Rada Tilly son las ciudades del país con mayor desigualdad de ingresos entre hombres y mujeres?
El Día Nacional del Pago Igualitario, declarado en la Argentina por la Asociación Civil Ecofeminita para poner foco sobre la brecha salarial por género, se celebrará este domingo como cada 9 de abril desde hace cinco años. Según los últimos datos presentados por Ecofemidata en su sitio web, en el tercer trimestre de 2022 la brecha de ingresos totales entre hombres y mujeres se ubicaba en 24,5%.
Planteada la desigualdad, la asociación multidisciplinaria, creada y conducida por mujeres, identificó las políticas públicas que "ayudan a reducir esta disparidad"; mientras que el Ministerio de Trabajo relevó que sólo 27,2% de las empresas que participaron en la Encuesta de Indicadores Laborales implementan planes por la igualdad de género.
Si bien este número resulta bajo, el ejercicio de analizar constantemente este indicador en las revisiones salariales permite generar líderes con mayor perspectiva de género, más conscientes de los sesgos que operan y con mayor sensibilidad a los miles de obstáculos que aún impiden el desarrollo igualitario de las mujeres en el mundo laboral. "No hay igualdad de género posible, sin pago equitativo y libre de sesgos", plantea Lucila Canónico, gerente de Recursos Humanos de Natura y Avón.
La ejecutiva planteó la necesidad de "no quedarnos en el molde, salir de los discursos vacíos y actuar sobre las realidades que nos atraviesan para generar impactos positivos y sostenidos". En alianza con la consultora global de recursos humanos Mercer, desde 2020 estas empresas realizan estudios anuales independiente de la situación salarial de sus equipos en 73 mercados.
Frente a la brecha salarial bruta, hay factores explicables que responden a diferencias entre jerarquías, experiencia, desempeño, antigüedad, país de residencia; pero hay otras que no se podían explicar por factores legítimos y que pueden ser causadas por inequidades basadas en género, que llaman la "brecha inexplicable".
"Actuar para cerrar la brecha salarial empieza por la determinación de las empresas en transformarnos en agentes de cambio, estableciendo objetivos claros y pasos a seguir", concluye Canónico.
¿Sabías que Comodoro y Rada Tilly son las ciudades del país con mayor desigualdad de ingresos entre hombres y mujeres?
El Observatorio de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas, de la Universidad Nacional de la Patagonia, difundió un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), a través de su Observatorio de Género, con un análisis integral del mercado trabajo, a propósito de la jornada del 8 de marzo.
Uno de los indicadores más contundentes del trabajo pone en evidencia la inequidad salarial que todavía existe y perjudica claramente a las mujeres, ya que se insertan mayoritariamente en sectores laborales con menor remuneración.
En ese mapa, Chubut ocupa las dos puntas de la brecha. Por un lado, presenta una de las diferencias más bajas del país en Rawson-Trelew, donde las mujeres ganan un 17,7% menos que los hombres. Y al mismo tiempo, Comodoro-Rada Tilly alcanzan el extremo más alto, con un 47,3%.
Dicho en otros términos, mientras los varones en Comodoro tienen un promedio salarial de $189.380, las mujeres alcanzan una media de sólo $99.711, según el relevamiento del CEPA en base a datos del INDEC.
Es notable también que la urbe petrolera supera por varios cuerpos al resto de los aglomerados urbanos, ya que ninguna supera el 40% de diferencia. El segundo en ese ranking negativo es Río Cuarto, con un 34,2%, mientras el podio de la desigualdad se completa con San Nicolás-Villa Constitución, con un 31,5%.
Las mujeres ocupan empleos de menor remuneración, entre los que aparecen educación, salud y servicio doméstico.
Al evaluar las causas de las inequidades, el CEPA alude a las razones estructurales del mercado de trabajo: “Históricamente, cuando las mujeres acceden al mercado de trabajo, que como hemos visto lo hacen de manera limitada, se incorporan mayoritariamente en determinados sectores –pondera el informe-. Suelen tener mayor representación en aquellos relacionados a tareas de cuidado, que son a su vez, los menos dinámicos y con remuneraciones más bajas”.
De acuerdo con datos del INDEC correspondientes al tercer trimestre de 2022, las mujeres ocupan casi el 73% del empleo en el rubro ‘Enseñanza’, es decir en el rol docente, en tanto el servicio doméstico es desempeñado por un 96,3% de mujeres. El tercer lugar, en rama de ocupación femenina, es el de ‘Salud’, con casi el 68% de los puestos laborales desempeñados por personal femenino.
“La sobrerrepresentación de mujeres en determinados sectores de la economía tiene como contracara la baja participación en otros –añade el informe-. Por ejemplo, en la Construcción y en las Actividades Primarias las mujeres explican solamente un 3,6% y un 22,8% respectivamente. En la misma línea, la industria manufacturera por su parte tuvo una representación del 33,1% de mujeres durante el mismo período. Es importante resaltar que estos sectores son los primeros en generar empleo frente a un escenario de crecimiento económico y generalmente no exigen niveles altos de capacitación y formación”.