COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) – La abogada y especialista en Derecho Laboral Gladis Szlapelis recordó en Actualidad 2.0 que “las desvinculaciones que se están generando son en el mercado en general, pero se ve acentuado el mercado petrolero”. Y remarcó que en base al padrón electoral del Sindicato Petrolero y la UOCRA se registra “un achicamiento de 4 mil afiliados menos”. Sin embargo, “el verdadero dato lo tiene la AFIP”, sostuvo.

Szlapelis sostuvo: "Las desvinculaciones que se están generando son en el mercado en general, se ve acentuado el mercado petrolero porque se achicó de forma considerable. Una fuente es que se sale vía despido y otra vía jubilación”.

Además, planteó: "Ahora hay que agilizar las herramientas para que tanto la parte empleadora como trabajadora puedan reabrir el mercado porque uno de los sostenes de la sociedad es el trabajo”.

La abogada detalló que “uno de los datos que puede tomarse con veracidad surge de los padrones electorales del sindicato. En octubre – noviembre fueron las elecciones de los sindicatos de mayor cantidad de empleados en la zona, y en los dos de mayor impacto como son Petroleros y UOCRA, los padrones denuncian un achicamiento de 4 mil afiliados menos”.

“Otra fuente de restricción de la fuente laboral entre el año pasado y este año que se vuelve a rearmar son los padrones para su presentación. Las elecciones de noviembre presentan una disminución con relación a las anteriores elecciones y se reacrecienta la desocupación en los últimos índices”, advirtió.

Además, planteó que las desvinculaciones laborales se pueden dar “vía acuerdos en la subsecretaria de Trabajo, acuerdos privados o escribanías, pero el análisis requiere de aspectos formales. Por lo que el verdadero dato lo tiene la AFIP”.

La restricción del mercado laboral pone más débil a la parte trabajadora y se lo termina asociando el riesgo del empleador al empleado. Si el empleador está con una situación económica gravosa la transfiere al trabajador y la indemnización es la mitad”, detalló.

A modo de ejemplo, planteó que “acá hay áreas de producción y hay una empresa que prestaba servicio, quizás reúna o no las condiciones de la empleadora o no tiene interés por lo que decide retirarse, queda el puesto de trabajo y la continua otra. Puede o no tomar al empleado, pero la fuerza negociable de los sindicatos ha llevado a que siempre se tomen al mismo empleado de antes y esto genera una estabilidad”.

“Pero hay que analizar si el mismo empleador, tiene los mismos cumplimientos, cómo son las estadísticas con relación al cumplimiento de obligaciones laborales, cómo es el trato con sindicato y cuál es su responsabilidad social empresarial, entre otros aspectos que hay que ver para definir si el empleado se queda”, explicó. Y agregó que al haber un cambio de empleador, “en principio parecería que no se tiene que pagar una indemnización porque es otra relación laboral. Adherís a otro marco contractual, en cambio, la parte empleadora están trabajando en lo mismo, reabsorbo la parte empleadora y mantengo la antigüedad”.

Por último, planteó que en caso de que sí se pague la indemnización por despido “se cierra la anterior relación y aparece una nueva que tiene la posibilidad de otorgar los 3 primeros meses a prueba. De modo que si pagaste la anterior, estos 3 meses pueden ser solo a prueba. Por eso, la negociación colectiva del sindicato es la que va generando estos espacios de seguridad par que pases de un sector a otro con la antigüedad y se genere la defensa del trabajo”.

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