Habló el padre de uno de los petroleros que murió en un yacimiento: "Nada va a calmar mi dolor"
Feliciano, también petrolero, cuestionó las medidas de seguridad y reclamó que las familias accedan a más información sobre la investigación.
NEUQUÉN - Cristian Baeza es uno de los dos operarios fallecidos en Fortín de Piedra el domingo pasado por la noche. Su padre, Feliciano, brindó una entrevista y contó cómo vivió el momento de la tragedia, además de no comprender cómo es que sucedió.
El hombre, también petrolero, no encuentra explicación sobre lo que sucedió en la planta de Tecpetrol debido a las medidas de seguridad vigentes. "Por qué mi hijo pudo transitar por ese lugar. No creo que haya saltado un alambrado para acortar camino. No se entiende que esto suceda en semejante planta. Por qué no había una soga o una malla que recubra el lugar", se preguntó desconsolado.
Además, agregó: "Le llevaron la vida. -Quizá- pasó por donde no tenía que pasar, pero las medidas de seguridad no eran las suficientes". Además, por su experiencia afirmó que es algo innato en los trabajadores del gremio protegerse "para cuidar el físico" y, según su conocimiento, explicó que los gases que emanan las piletas pueden "causar mareos o desvanecimientos".
Después se refirió al grado de conocimiento que tiene el círculo familiar acerca del avance de la causa y reclamó por "más explicaciones". "Ayer estuve en la fiscalía y me dijeron que hay pericias fílmicas. Hay testigos. Es una planta muy concurrida", sostuvo.
Respecto a Cristian, de 34 años, comentó: "Por ahí fue el exceso de confianza que no es bueno en esto, es como con la velocidad de los autos. Mi hijo era audaz. Era un fanático de los motores".
"Nada va a calmar mi dolor. Digan lo que me digan, mi hijo ya no está más. Era mi vida mi hijo. Es mi único hijo varón y el mayor, y nació para mi cumpleaños. La muerte se llevó a mi hijo. Es tan grande el dolor que tengo", reveló, claramente emocionado en diálogo con el programa Línea abierta.
"No creo que haya un dolor tan grande como un padre que pierde a su hijo. No me imagino algo peor que esto. Cuando me avisaron, me fui a buscar a mi nene, buscando no sé qué. Me tocó a mí. Tengo más hijos y quiero aguantar por ellos y por mis nietos", dijo mientras contenía las lágrimar.
Por último, cuestionó el accionar del gremio tras la tragedia que se llevó a Cristian y a Maximiliano Francisco Zappia, de 23 años. "Por qué hacen esto cuando deben ser poderes opuestos. Por qué permitimos que esas cosas pasen, que por el mismo canal vayan el agua y el aceite. Tienen que tomar las medidas de seguridad para la gente. Cómo el gremio va a manejar la ART, buscan ese negocio", denunció.
La familia de Cristian recibirá el cuerpo en las próximas horas, después de la autopsia y de que el cadáver emane los gases tóxicos producto de la caída en la pileta.