Impactante hallazgo: descubrieron en Chubut restos del primer perro de carga de Sudamérica
Profesionales de la UNPSJB de Comodoro Rivadavia y Esquel, fueron los protagonistas del descubrimiento del esqueleto, que quedó expuesto debido a la constante erosión y los fuertes vientos.
En un impresionante hallazgo en Chubut, investigadores de la UNPSJB (Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco) descubrieron al primer perro de carga en Sudamérica. Participaron investigadores de las sedes Comodoro Rivadavia y Esquel, quienes forman parte del CONICET.
Cabe señalar que se han registrado hechos similares en América del Norte, Europa y Asia. Sin embargo, hasta el momento no habían precedentes en la región.
La investigación fue publicada en la prestigiosa revista internacional Journal of Archaeological Science: Reports. Además, estuvo a cargo del equipo científico integrado por los Dres. Leandro Zilio (CONICET; UNPSJB;IDEAus-CENPAT), Heidi Hammond (CONICET; UNPSJB; IDEAus-CENPAT), Santiago Peralta González (UNPSJB; IDEAus-CENPAT), María Laura Parolin (CONICET; IDEAus-CENPAT), Alejandro Montes (CONICET; CODIC; ICPA-UNTDF), Silvina Mariela Ocampo (UNPSJB) y Julián Eduardo Moreno (CONICET; UNPSJB; IDEAus-CENPAT), en el marco del proyecto “Arqueología de cazadores recolectores en el bajo de Sarmiento (Sarmiento, Chubut)”, dirigido por el Dr. Eduardo Moreno.
Además de los proyectos “Procesos de cambio cultural y biológico en poblaciones Indígenas de Patagonia Central: estudio de casos”, y “Evolución paleoambiental del bajo de Sarmiento desde el tardiglacial hasta la actualidad a partir del estudio de sedimentos lacustres, fluviales y eólicos”.
EL DESCUBRIMIENTO
Ocurrió en el verano de 2022, en el marco de una campaña arqueológica realizada al sureste del lago Colhué Huapi, en la provincia de Chubut, por un equipo de diversas instituciones, durante proyectos de investigación.
Allí, se supo que los investigadores hallaron el esqueleto del animal que quedó expuesto debido a la constante erosión y los fuertes vientos patagónicos.
Asimismo, el equipo de científicos señaló que los restos óseos del perro, de la especie Canis familiaris revelaron evidencias de haber sido utilizados como animal de carga por las comunidades que habitaron la región de la Patagonia Central en el siglo XVII.
Asimismo, su descubrimiento, otorga indicios sobre la interacción entre los antiguos pueblos nómadas y sus compañeros caninos. Además, revela la relación que mantenían los cazadores-recolectores con los perros en el pasado, destacando que estos animales desempeñaban un papel crucial en la vida cotidiana de estas comunidades.
En tanto, el animal fue bautizado “Huachen”, en honor a la famosa milonga que remite a un perro y fue compuesta por el artista Hugo Giménez Agüero, exponente del folclore patagónico.
Por otra parte, estiman que la vida de Huachen estaba dedicada a la colaboración y al beneficio comunitario. En una época en la que el transporte de objetos cotidianos recaía en las personas y el uso de caballos aún no era común, los perros como Huachen desempeñaban un papel crucial. De esta manera, ayudaban en el transporte de cargas durante los viajes de los pobladores, recibiendo a cambio cuidado, protección y alimento.
Respecto a los estudios osteológicos sobre las muestras encontradas, revelaron que se trataba de un ejemplar macho de entre dos y tres años de edad, de tamaño mediano (52 cm) y un peso aproximado de 19 kg. Este individuo formaba parte de una comunidad de antiguos pobladores que lo utilizaban para transportar objetos, lo que dejó huellas en sus vértebras torácicas, lumbares y en el sacro.