Los Bomberos Voluntarios de San Patricio del Chañar enfrentan una situación insólita y preocupante: recibieron cuatro multas por exceso de velocidad mientras respondían a emergencias. Los infractores no eran conductores imprudentes, sino los propios vehículos de la institución, que fueron captados por los radares instalados en la Ruta 7, administrados por la Municipalidad local.
El primer aviso de infracción llegó en diciembre del año pasado, pero la situación se agravó con tres nuevas multas, elevando el monto total a más de 800 mil pesos. "No podemos permitirles que pretendan cobrarnos por hacer nuestro trabajo", expresaron los bomberos en un comunicado, destacando la paradoja de ser penalizados por cumplir su labor de salvar vidas.
A pesar de haber informado a la Municipalidad sobre los vehículos oficiales y haber presentado descargos en cada ocasión, las respuestas nunca llegaron. La situación se agrava en un contexto donde los bomberos ya enfrentan dificultades por la falta de recursos y apoyo municipal. El intendente Gonzalo Núñez, en reuniones anteriores, había manifestado que las finanzas municipales no permitían renovar el convenio de colaboración ni financiar nuevos proyectos propuestos por la institución, como un programa de capacitación comunitaria.
Por Emmanuel Hueicha