La cebolla subió más de 430% en 2022 y los especialistas apuntan a los problemas climáticos
Se convirtió en uno de los productos con más subas en lo que va del año: en enero el precio era de $64,96 kg, y en septiembre se registró un valor a $348,66 kg. Los expertos señalan que el incremento responde al exceso de agua en el primer trimestre de 2022.
La cebolla se convirtió en uno de los productos que más aumentaron este año. En enero el precio era de $64,96 kg, y en septiembre se registró un valor a $348,66 kg. Esto representa un aumento del 436,73% en lo que va del año.
Según indican los productores y expertos, la subida del valor del producto responde al exceso de agua en el primer trimestre de 2022, que pudrió los bulbos, y a la caída en el área sembrada producto de los altos costos en los insumos. El producto le ganó a la inflación general acumulada, del 66,1%.
Hace pocas semanas, entró poco volumen de cebollas al Mercado Central desde el sur de la provincia de Buenos Aires y también llegó producción con un mayor precio, en este contexto, desde Santiago del Estero. En el medio se importó más de Brasil. Ahora se espera que con los productos que vienen desde San Juan y Mendoza los precios puedan estabilizarse dentro de los próximos 10 días.
“Hay cebolla que se descartó y se desechó toda lo que no estaba apta para comercializar. Lo que se pierde es relativo, pero aparte de eso, los números son bastante malos”, contó Iván Potap, un productor del sur de la provincia de Buenos Aires a La Nación.
Además, explicó que “para abastecer el mercado se estaba trayendo de Brasil” por el problema de calidad que se presentó en el producto nacional.
En Viedma, contó, ahora están teniendo problemas con un gusano que se come los brotes de la siembra, algo que podría traer consecuencias en la próxima campaña. “No se sabe cómo va a ir este año, porque va a estar afectada por este gusano cebollero, pero el próximo año va a ser de poca producción de cebolla en el país”, aventuró Rodríguez.
“En la temporada pasada quedó la cebolla tirada en el campo. No se vendió a ningún precio. Cayó una lluvia y con el calor esto hizo que la cebolla se apestara. Terminó ahí su ciclo. No creció más, quedó toda chica y mediana, con muy poco rinde. Esto nos afectó a todos”, dijo Benito Rodríguez, un productor de Río Negro.
