La historia del MPN: el partido que lideró Neuquén durante 6 décadas
De la mano de Elías y Felipe Sapag, el MPN se transformó en uno de los partidos políticos más fuertes del país.
La historia del Movimiento Popular Neuquino (MPN) es un relato de adaptabilidad y persistencia política que ha marcado las últimas seis décadas en la provincia de Neuquén. Surgido en los años 60 como respuesta a la proscripción del peronismo, el MPN gobernó con diferentes fuerzas políticas y líderes, manteniendo su influencia incluso en momentos de cambio de poder.
La familia Sapag desempeñó un papel central en esta historia, estableciendo una dinastía política. Desde Amado y Elías Sapag hasta figuras más recientes como Jorge Sapag, Felipe Sapag, y actualmente, con Omar Gutiérrez y Rolando Figueroa, los Sapag dejaron una marca indeleble en la política neuquina.
A pesar de los cambios de signo partidario y las alianzas diversas, el MPN mantuvo su relevancia en la escena política provincial. Gobernó durante períodos de dictadura, democracia, y enfrentó desafíos significativos durante el menemismo, cuando la provincia experimentó protestas sociales y resistencia a la entrega de recursos.
El asesinato del maestro Carlos Fuentealba marcó el final de la gestión de Jorge Sobisch y abrió paso al retorno formal de los Sapag al poder, esta vez con Jorge Sapag a la cabeza. La alianza política que facilitó su regreso mostró la capacidad del MPN para adaptarse a los diferentes contextos políticos.
Omar Gutiérrez, exgobernador del MPN, mantuvo la continuidad en el poder desde 2015, atravesando cambios a nivel nacional con la llegada de Mauricio Macri a la Presidencia. Su reelección en 2019 confirmó la persistencia del MPN en la escena política neuquina.
Sin embargo, la reciente elección de Rolando Figueroa, proveniente de una escisión del MPN, como nuevo gobernador añade un nuevo capítulo a esta historia. La familia Sapag y el MPN siguen siendo actores clave, pero la política neuquina continúa evolucionando, demostrando que ninguna dinastía política es inmune a los cambios y desafíos del tiempo.