Le llegó una factura de luz de $840.000 y fue a pagar con efectivo en una carretilla: “Es imposible con estos costos”
Muy indignado, el hombre fue en persona y con bolsas con el dinero para abonar la exorbitante cifra que le llegó en la boleta del último mes. "Vamos a ver si el mes que viene podemos pagar la luz”, señaló.
En medio de la eliminación de subsidios y el consecuente aumento de tarifas, un comerciante de Huinca Renancó, en Córdoba, se vio sorprendido al recibir una boleta de luz para su negocio por un monto de $840.000. Ante esta situación fue a pagarla, pero de una manera diferente.
Darío Villarruel, el protagonista del hecho, se presentó este lunes para abonar el servicio de una manera rara: con una carretilla llena de billetes de $100 y $200.
El trabajador, muy indignado, fue y habló con los presentes para hacer su descargo. “Voy a pagar la luz que me vino en el negocio, $840.000 todos billetes de $100. Pago con lo que pude ahorrar. Vamos a ver si el mes que viene podemos pagar la luz”, dijo.
La situación fue registrada por Cable digital, el medio local que brindó detalles exclusivos de la queja por la factura de luz en las afueras del local.
“Es imposible pagar estos costos y, si se los trasladamos a la gente, no nos sirve”, descargó.
“A mí me cuesta juntar esta plata, como a cualquier negocio. Tenemos que buscarle una solución para todo el pueblo. Yo me puedo quejar a la cooperativa de acá, pero esa protesta nunca va a llegar a EPEC (la empresa provincial eléctrica de Córdoba)”, lanzó con bronca y incertidumbre respecto de lo que ocurra el próximo mes.
Sin ir más lejos, el cordobés fue adentro de la oficina de la oficina de la Cooperativa de Electricidad Huinca Renancó presentando la carretilla y el dinero. “Es una especie de reclamo pacífico. Pasa que no podemos pagar estas sumas millonarias. Hablamos de $1 millón de luz en un pueblo. Varios negocios estamos por cerrar porque no podemos pagar los gastos”, anunció.
El individuo expresó su preocupación por los futuros aumentos y los elevados montos que deberá abonar, manifestando: "Mirá si se me atrasan dos boletas, tengo que cerrar".