Los factores de riesgo de las mujeres que pueden terminar por dañar su salud cardiovascular
En la Semana del Día de la Mujer conversamos con Macarena Grassi, cardióloga de la Clínica del Valle, para prevenir enfermedades cardiovasculares.
“Tenemos factores de riesgo que podemos modificar y factores que no, como son la edad y el sexo; principalmente, las mujeres tenemos la misma posibilidad de riesgo cardiovascular, pero sí tenemos mayor mortalidad cuando tenemos la enfermedad cardiovascular, y sumamos tabaquismo, diabetes, sedentarismo”, explicó Macarena Grassi, cardióloga de la Clínica del Valle en diálogo con ADNSUR.
“Pero las mujeres tenemos otras situaciones que se suman, como la etapa del embarazo, la mujer tiene cambios y puedan producir cambios como la diabetes gestacional y la hipertensión arterial en el embarazo, como son los obstétricos, con riesgo de ACV. Por ejemplo esto se da en pacientes con partos prematuros o pacientes con pérdidas gestacionales o abortos espontáneos, porque nos habla de mayor riesgo gestacional”, indica.
“Tenemos el riesgo que presentamos las mujeres en la menopausia. A partir de este momento se equipara mucho el riesgo con el sexo masculino porque lo que comienza a descender son los estrógenos y se puede desarrollar la enfermedad cardiovascular y mientras más precoz sea nuestra menopausia, se acerca a los 45 años, aumenta el 2% de la enfermedad cardiovascular".
"La mortalidad hoy principalmente en las mujeres está ligada al infarto; es la obstrucción de una arteria, de forma aguda, que nos genera una disminución de la circulación en el corazón y no funciona de la misma manera, por lo cual debemos ser tratadas e ingresar al sistema de emergencia, preferiblemente dentro de los 30 minutos, para recibir un tratamiento adecuado que sería la colocación del stent, es una hora el momento, después el riesgo aumenta”.
LAS MUJERES CONSULTAN TARDE, POR ESTAR AL CUIDADO DE OTROS
“Nos dimos cuenta de que las mujeres tardan en consultar, tienen una demora. Se empezó a analizar en distintos estudios, en niveles europeos, norteamericanos y demás, para ver por qué tardan y cómo mejorar desde el sistema de salud llegar a las mujeres”, dice la especialista.
“Se vio que hay algunas cuestiones que no tienen que ver con la salud cardiovascular previa, como que algunas mujeres priorizan la salud y el cuidado de sus familiares. Por otro lado el nivel educativo, las mujeres tienen menos nivel educativo y no el acceso a los servicios de salud, como también que dependen de alguien que las traslade”, agrega Grassi.
“La mujer es diez años más grande que los hombres en la enfermedad cardiovascular. En estos casos se ven que son personas que tienen al cuidado de otra. Las personas que están con las mujeres tienen que escuchar el pedido de esas mujeres para que las lleven hasta el lugar de atención”, advierte.
DIABETES EN MUJERES
“La diabetes en mujeres esta asociada al sedentarismo y la obesidad; tiene que ver con esto de quedarnos en casa, y empezamos a comer, sin importar si son cosas saludables o no. Obviamente que mientras no sean alimentos que preparamos y procesados, son alimentos que no ayudan uy pueden aumentar el peso”, precisa.
Sin embargo, una vez que las mujeres comienzan un tratamiento, se adhieren a él, y también cuando ayudan a un familiar, siempre los acompañan y adhieren a los tratamientos de sus familiares.