Las universidades nacionales afrontan una etapa de crisis tras el recorte presupuestario llevado a cabo por el Gobierno de Javier Milei en nombre del ajuste económico, una de las principales premisas de la gestión libertaria. En este marco, un informe de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (UNPSJB) reveló la crisis que atraviesa la institución y la preocupación e incertidumbre de los docentes, no docentes y estudiantes. 

En el mes de diciembre del 2023 el Consejo Superior de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (UNPSJB) prorrogó el presupuesto 2023.

En la resolución, expresaron que “ante la crítica situación socioeconómica e institucional es necesario informar a la comunidad que el presupuesto reconducido por el Gobierno Nacional para la Universidad - con destino al funcionamiento durante el ciclo lectivo 2024 - resulta insuficiente para afrontar los gastos necesarios dirigidos a garantizar la continuidad y el normal desarrollo de las actividades”.

En enero se afrontó las consecuencias de las demoras de los fondos para pagar haberes, y desde entonces se aplican medidas de restricción ante una inflación sostenida en los últimos meses.

Un informe de la UNPSJB da cuenta del recorte prespuestario y cómo afectaría al total funcionamiento de las actividades a corto plazo

Cabe recordar que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que la inflación en el primer trimestre de 2024 fue del 51,6%, mientras que el incremento interanual en marzo llegó al 287,9%. En este marco, el Ministerio de Capital Humano anunció, a mediados de marzo, un incremento del 70% en las partidas presupuestarias que se destinan a las universidades.

La noticia se dio a conocer horas antes del paro de docentes y no docentes de las 55 Universidades Nacionales en rechazo al congelamiento de presupuesto y a la caída de los salarios. Sin embargo, según se informó desde la UNPSJB, a la fecha, la transferencia aún no se registró e incluso solo se remitieron fondos para el pago de salarios.

Otro aspecto sobresaliente en el funcionamiento y desarrollo de las unidades académicas son los financiamientos por programas, a los que se accedía mediante presentación de proyectos, y que están suspendidos actualmente. Por ejemplo, el programa Red Nacional de Simulación Clínica (ReNaSiC), el Programa de Doctorado recibió solo el 50% de los fondos, el Programa de Fortalecimiento de la extensión universitaria, el Programa de Fortalecimiento en acciones sustantivas de ciencia y técnica, entre otros.

El informe oficial indica que la inversión en servicios públicos, limpieza, seguridad y conectividad ascendía en noviembre de 2023 a $50.638.306,55, en marzo de 2024 a 80 millones de pesos, esperando un aumento inminente en el orden del 80% dado por el reconocimiento de ajustes de tarifas de los servicios básicos contratados, y el aumento anunciado de tarifas de servicios públicos, más la quita de subsidios anunciada.

La situación económica financiera que atraviesa el sistema universitario público es grave y necesita urgente respuesta por partes de los poderes del Estado

El envío mensual de fondos para marzo asciende a $95.075.090,00 con el aumento anunciado totalizaría la suma de $162.073.378,00, fondos que aún no ingresaron.  En este sentido, el 95% del presupuesto se destina a salarios, un 5% para gastos de funcionamiento: servicios básicos, becas, comedor, mantenimiento de albergues, insumos de laboratorio. Además de mantenimiento de equipos, salidas de campo de estudiantes, conectividad, etc.

En este escenario se sostienen 700 becas, distribuidas en las cuatro sedes de Chubut, sin incrementos respecto a noviembre del 2023. Se trata de becas completas e incompletas, becas de alimentos, alojamiento y fotocopias. En cuanto al alojamiento se posee 146 lugares en Comodoro Rivadavia, Esquel y Puerto Madryn, y por primera vez en varios años hay una larga lista de espera. 

En materia de obras, la más importante que por ahora se viene postergando la apertura de la licitación, y probablemente fracase definitivamente, es el nuevo Edificio para Laboratorios de Enfermería y Medicina de Comodoro. Es una obra con financiamiento compartido entre el Estado Nacional y el Banco de Desarrollo para América Latina (CAF).

Después por la crisis económica no se pudieron finalizar los laboratorios de la Facultad de Ciencias Naturales y Ciencias de la Salud FCNyCS de Esquel y la refacción del Patio Magno de Comodoro.

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