Un nene de 11 años murió en medio de una matiné al atragantarse con un chupetín. La tragedia ocurrió en el club El Porvenir de Castelar.

Joaquín Román Centeno estaba comiendo la golosina cuando se le rompió el palito y se ahogó con caramelo. El menor se descompensó y murió inmediatamente.

El trágico episodio ocurrió en la sede del club barrial, en Salvador Curutchet al 2200 en Castelar. Pese a que las personas que estaban en el lugar lo asistieron de inmediato y fue trasladado de urgencia al Hospital de Morón, los médicos no pudieron salvarle la vida.

Fuentes judiciales informaron al portal Primer Plano Online que una de las posibles causas sería el ahogamiento con la golosina. No obstante, también podría haberse tratado de una muerte súbita. 

La investigación está a cargo de la fiscal Valeria Courtade, de la Fiscalía N°3 de Morón.

Tragedia similar

En julio pasado murió un nene de 10 años que se atragantó con un palito de chupetín en el colegio tras caerse al suelo con la golosina en la boca.  Tras ser internado, el menor sufrió un paro cardiorrespiratorio y murió.

Ocurrió en el patio de la escuela Villa Eucarística. El menor jugaba con sus amigos y corría por el lugar cuando se tropezó y ocurrió el trágico accidente. 

Luego de realizarse maniobras de reanimación, fue rápidamente trasladado al Hospital Raúl Ferreyra, sitio al que arribó con un notorio cuadro de ahogamiento y asfixia.

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