RAWSON (ADNSUR) - La Fiscalía de Estado del Chubut se constituyó como querellante para intervenir en la persecución penal que dio inicio por los incendios forestales en la Cordillera, a través de una presentación ante el Ministerio Público Fiscal de Lago Puelo, zona epicentro de los siniestros.

El escrito judicial se presentó en las últimas horas por instrucción del Fiscal de Estado adjunto del Chubut, Christian Marcelo Martínez, donde se solicita se admita la participación de la Provincia del Chubut, para garantizar la tutela judicial desde el inicio del proceso, con base en el interés del Estado provincial con respecto a las medidas y el resultado de la investigación judicial en curso, tanto por el perjuicio producido por los incendios no solo a los bienes de los pobladores, sino también los bosques nativos, propiedad del Estado.

Sobre este punto, señala que “la Provincia tiene el dominio sobre estas masas boscosas para su aprovechamiento, mejoramiento sostenible, defensa y ampliación, tal como lo establece la Constitución Provincial de Chubut y en línea con los presupuestos mínimos de Protección Ambiental para la forestación originaria, protegida por leyes nacionales”.

“Hay intencionalidad en los incendios"

En la habitual rueda de prensa, realizada en Casa de Gobierno, el Jefe de Asesores, Claudio Blanchart, aseguró que “hay intencionalidad en los incendios y en ese sentido el gobernador, Mariano Arcioni, fue muy claro, tenemos que llegar a saber quién fue y hay que tener una actitud de encontrar a los responsables”, sostuvo.

Asimismo, explicó que “la Fiscalía de Estado se presentó como querellante en el inicio de causas que pudieran surgir con relación a la averiguación de los causantes de esto y queremos reforzar también la decisión del Gobernador en cuanto a la recompensa de 100 mil pesos por los aportes que puedan hacer los ciudadanos para esclarecer quienes fueron los responsables de esta situación”.

Continuando informó que “el incendio en Epuyén se inició por un cortocircuito en red de baja tensión y la situación no es fácil de controlar. Hoy hay 550 hectáreas afectadas y más allá de las condiciones meteorologías que no ayudan, el problema es la vegetación que es pinar y complica un poco más la situación”.

“Hay que destacar el trabajo en conjunto que estamos haciendo con Municipio, Ministerio de Gobierno con la Dirección General de Defensa Civil, Ministerio de Familia, de Producción, con el Servicio Provincial de Manejo de Fuego, y los ciudadanos que se aceran a colaborar en lo que se necesita junto con bomberos y brigadistas”, agregó.

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