Preocupa el abandono de los tratamientos para la ansiedad y la depresión debido a los altos costos de los medicamentos

El médico psiquiatra, Gustavo Escobar, habló con ADNSUR respecto a la ansiedad y la depresión, dos trastornos de salud mental distintos, pero que a menudo se superponen o coexisten en una misma persona. En este marco, mostró su preocupación por el abandono de los tratamientos debido a los altos costos de los medicamentos. 

La ansiedad es una respuesta natural del cuerpo ante el estrés y las situaciones de peligro. Sin embargo, cuando la ansiedad se vuelve crónica, excesiva o desproporcionada en relación con la situación, puede ser un trastorno. 

Los síntomas de la ansiedad pueden incluir preocupación constante, tensión, nerviosismo, agitación, sudoración, palpitaciones, temblores y otros síntomas físicos y psicológicos. Los trastornos de ansiedad comunes incluyen el trastorno de ansiedad generalizada, el trastorno de pánico y el trastorno de estrés postraumático.

En contacto con ADNSUR, el médico psiquiatra detalló que “el aparato psíquico tiene la capacidad de adaptarse a los cambios. El problema está cuando fracasan los mecanismos de adaptación. Es normal estar triste, frustrado, sobre todo cuando uno tiene un motivo”.

“Ese estrés puede generar un desgaste en la capacidad normal que tiene la persona para adaptarse y eso desata un sufrimiento psíquico que puede transformarse en una patología, por ejemplo, en una depresión mayor”.

La depresión es un trastorno del estado de ánimo caracterizado por sentimientos de tristeza, apatía, desesperanza, fatiga y una disminución del interés en las actividades cotidianas. Los síntomas de la depresión pueden incluir cambios en el apetito y el sueño, dificultad para concentrarse, sentimientos de culpa o inutilidad, y en casos graves, pensamientos suicidas. La depresión clínica, también conocida como trastorno depresivo mayor, es una forma grave de depresión.

En este sentido explicó que "para que haya un padecimiento psiquiátrico se tienen que dar cuatro posibilidades: la predisposición psíquica-genética, la personalidad, la historia de vida y las circunstancias a las que está sometido". 

"Cuando los mecanismos de adaptación fracasan y desatan síntomas en el trastorno del sueño, del apetito ahí ya hace falta la medicación", dijo y agregó que actualmente, ante la crisis económica, "es un problema el costo de la medicación y la consulta". 

En este sentido, el médico se refirió a la psicofarmacología. "Esta semana tuve el caso de una paciente que toma dos antidepresivos porque trabajan en diferentes zonas del cerebro, pero hay uno que su precio se torna imposible, entonces suplimos un medicamento por otro. Hasta ahora hemos logrado, bajando mucho los costos del tratamiento, mantener la estabilidad emocional de la paciente". 

Escobar además indicó que "muchas veces los pacientes pueden funcionar con un solo medicamento con un seguimiento y dosis adecuadas". 

Respecto al abastecimiento de medicamentos para la salud mental, el médico aseguró que se han suspendido "algunos esenciales" como el Carbonato de Litio "que es un medicamento que sirve para el trastorno bipolar y no se puede interrumpir bajo ningún aspecto salvo indicación médica".

"En esos casos hay que aplicar opciones científicas que puedan suplir medicamentos y lograr la eficacia del tratamiento. Es todo un desafío", manifestó.  En relación a estos psicofármacos dijo que “no están entre los remedios más caros” ya que “hay remedios de la medicina general que tienen costos altísimos y no se pueden comprar.  Además hay obras sociales que tienen amplia cobertura y otras que no”. 

Finalmente y consultado sobre la duración de los tratamientos, el médico comentó que “en una depresión mayor, el tratamiento debe permanecer durante un año contando con la quita gradual de la medicación. En los trastornos de ansiedad el tiempo para una mejora es más o menos parecido. Depende de muchos factores”.