Se rieron de ella porque usaba bikini y respondió con una lección
La mujer pidió que las personas que se burlan sean concientes del impacto que puede tener. Su consejo para los chicos.
Shelly Proebstel, una chica oriunda de Nueva Zelanda, dejó a todos con la boca abierta después de pasar por una situación muy incómoda en una playa de Mount Mauganui.
La mujer fue a disfrutar del sol como cualquier turista o nativo de esas paradisíacas costas del pacífico. Todo iba bien hasta que se sacó su pareo y un grupo de chicos empezó a señalarla y hacerle burlas por su aspecto físico.
La mujer no pasó por alto esta actitud y ensayó una respuesta a través de las redes sociales que se viralizó a los pocos minutos.
En su descargo señaló que este tipo de actitudes son las que generan desde inseguridades hasta trastornos en la alimentación y suicidio. Si bien aclaró que “no es todo responsabilidad de quienes se burlan”, deben tomar consciencia de las consecuencias que pueden tener sus actos.
“Es por tontos como ustedes que la gente es tan insegura sobre su imagen corporal; que las mujeres no se sienten cómodas al ponerse una bikini, trikini o un vestido corto”, enumeró en su post, que ya lleva 53 mil me gusta, más de 8 mil comentarios y que fue compartido 16.200 veces. “Es por gente como ustedes que las personas se matan de hambre y se enferman en el esfuerzo por mantener una figura similar a la de una modelo; que visten mangas largas todo el año porque les asusta mostrar sus brazos”, continuó.
Proebstel le aconsejó a esta gente que la próxima vez que vean a alguien como ella en la playa, antes de señalarla y reírse, se tomen un momento para pensar en el daño que pueden provocar. “No todas las personas –ya sean jóvenes o adultas, hombres o mujeres– aprendieron a soportar estas actitudes como yo, que las ignoro”, consideró.
La joven confesó que estuvo a punto de volver a cubrirse con su pareo pero que, luego de un segundo, se recordó todo lo que aprendió en su vida. “Así que levanté la cabeza, saqué mi panza y vestí esa bikini con orgullo”, desafió.
Proebstel envió un mensaje a los padres, para que les enseñen a sus hijos que no existe una sola forma corporal, que hay un arcoíris de cuerpos hermosos. “Les pido que los instruyan para no quedarse mirando un estómago más grande de los que suelen ver en la TV sino que miren a esas personas a la cara; que les inculquen el ser bondadosos con todo tipo de gente, sin importar su apariencia”, solicitó.
Por último, recomendó que los chicos aprendan a ser “el cambio positivo que necesitamos ver en el mundo, así en 5, 10 o 20 años, no existan más personas que pasen por esto”. La mayor parte de los comentarios que llegaron fueron de apoyo a su actitud, al tiempo que algunos relataron situaciones similares. En otro post, Proebstel agradeció la repercusión de sus palabras y aclaró que es una mujer saludable –explicando su rutina de ejercicios y alimentación–, “tal vez más que muchas personas flacas”.