Si Estados Unidos y Rusia desatan una guerra nuclear, Argentina es el destino ideal para sobrevivir
Se trata de una investigación global que estima la producción de cultivos tras el conflicto y basada en simulaciones por computadora.
Según un estudio científico, Argentina tiene mejor esperanza de sobrevivir durante una década después de las consecuencias de una potencial guerra nuclear entre Rusia y Estados Unidos. Se trata de una investigación global que estima la producción de cultivos tras el conflicto y basada en simulaciones por computadora. Australia sería el segundo destino ideal para sobrevivir.
En la última semana, el gobierno de Vladimir Putin encendió las alertas en el plano internacional respecto a la posibilidad de una escalada que pudiera terminar en una guerra nuclear. Ante este hipotético escenario, un reciente estudio internacional reveló que Argentina y Australia son los mejores destinos para sobrevivir ante una guerra nuclear, al menos hasta una década después de haber iniciado.
El dato fue publicado originalmente por la revista internacional Nature Food y difundido esta semana en la edición del diario estadounidense The Times. “Según un nuevo estudio, los países con mayores esperanzas de al menos ver sobrevivir a su civilización en la década siguiente a una guerra nuclear serían Argentina y Australia”, publicó el matutino.
¿Por qué aparece Argentina entre los países con mejores resultados?
Según el diario, la mayoría de los países vieron al menos una reducción del 90 por ciento en calorías. La razón por la que algunos países como Australia y Argentina, y una franja de África central, pudieron mantener la producción de calorías fue porque ya trabajaban cultivos más resistentes como el trigo —en grandes cantidades— y tenían pocas poblaciones.
Dicho estudio analizó qué podría suceder en el mundo luego de los incendios masivos iniciados por el estallido de una guerra nuclear y el impacto que tendría en la producción de alimentos ante el hollín existente, que a su vez afectaría en la iluminación del sol.
“Todo el mundo entiende que el efecto directo de la guerra nuclear sería terrible, como vimos en Hiroshima y Nagasaki”, le dijo el profesor Alan Robock, de la Universidad de Rutgers en Nueva Jersey, a The Times. “Nuestro trabajo muestra que más de diez veces más de personas podrían morir en el resto del mundo debido a los impactos sobre el clima y la agricultura”, culminó el especialista.