Su casa comenzó a incendiarse mientras dormía: su perro lo arrastró hasta el comedor y le salvó la vida
Ocurrió en la provincia de Buenos Aires. El hombre se quedó dormido mirando la tele y empezaron las llamas. Después de salvar a su dueño, el perro ingresó otra vez a la casa y salvó al gatito de la familia que no podía salir de la casa en llamas.
Hace unos días, un incendio devoró una casa ubicada en el barrio de Rafael Castillo, en la provincia de Buenos Aires. Las llamas casi terminan con la vida de Gabriel Gómez, dueño de la casa.
El milagro ocurrió gracias al héroe: Chiquito, su perro, logró rescatarlo de las llamas a tiempo. Arrastró al hombre hacia el comedor y lo despertó.
“Me salvó la vida, volví a nacer”, le contó a TN. Es que el perro mestizo de la familia, Chiquito, fue su salvador. Según explicó el hombre, esa tarde llegó de trabajar y se recostó unos minutos a mirar la tele. “Me quedé dormido. En un momento sentí un ruido y se cortó la luz, pero no le di bolilla”, recordó.
A causa del humo y monóxido de carbono inhalado, Gabriel se desmayó y ahí entró en acción el héroe. “Él estaba afuera, no sé cómo hizo para entrar, pero pasó y me hizo caer de la cama. Yo no me podía despertar, me arrastró hasta el comedor y con manotazos y lamidas me despertó”, contó Gabriel.
“Cuando me despabilé completamente veo todo nublado, colores y calor. Estaba prendiéndose fuego todo, quise abrir la puerta y me quemé la mano”, detalló el hombre, quien pidió ayuda a un grupo de nenes que estaba jugando a la pelota. Entre ellos se encontraban sus sobrinos. “Ellos salieron corriendo a pedir auxilio, a buscar a mis hermanos que viven a una cuadra. Ahí salieron los vecinos y con una silla rompieron todo el ventanal”, explicó.
Gabriel ya estaba a salvo, pero Chiquito ya se había convertido en héroe y su tarea no estaba terminada. ”Entró de nuevo y sacó al gatito de la pieza, colgado de la boca como si fuera la mamá”, contó.
El hombre se salvó, pero perdió todo. Mientras intenta rescatar lo que puede y volver a construir su hogar, duerme adentro del contenedor de un camión frigorífico. “De día no puedo entrar por el calor, entro como a las 2:00 de la mañana, es lo único que tengo”, manifestó. Para donaciones: 116859-0168