Subió la nafta y el salto más fuerte en el precio llegaría en agosto: cuánto sale el litro en Comodoro
Los nuevos valores que rigen en estaciones de servicio de YPF quedaron actualizados este lunes. ¿Cuánto sale llenar el tanque?
Finalmente, el gobierno de Javier Milei decidió postergar un mes más la actualización completa de los impuestos que rigen sobre los combustibles, para atenuar el impacto que este producto genera en el índice de inflación.
A partir de esta medida, en la que trasladó parcialmente la actualización del Impuesto a los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono.
Los combustibles subieron un 3%, y los nuevos valores que rigen en estaciones de servicio de la marca YPF en Comodoro Rivadavia son los siguientes:
⛽Nafta Súper, $800.
⛽Nafta Infinia, $1.016.
⛽Diésel 500 (común), $1048.
⛽Infinia Diésel, $1.262.
Lo que establece el decreto de las últimas horas es que la actualización completa de los impuestos, en base a la inflación del primer trimestre de 2024, será aplicada en el mes de agosto, lo que implicaría para ese mes una suba del orden del 18% en los precios de las naftas y el gasoil.
CUÁNTO CUESTA LLENAR EL TANQUE
De este modo, el salto en el precio quedó algo atenuado, aunque no por ello deja de sentirse en los bolsillos. Para llenar el tanque de un vehículo chico o mediano, por ejemplo, con 45 litros de nafta Súper, hoy se necesitan no menos de $36.000, cuando hasta el 8 de diciembre pasado, previo a la asunción del actual gobierno, ese monto era de $16.000.
Para cargar con nafta Infinia, el mismo vehículo necesitaría hoy casi $46.000, frente a los $21.000 que costaba hasta principios de diciembre último. Y una camioneta que requiere el diésel de mayor refino, con una carga de 75 litros, hoy necesitaría casi $95.000, frente a los $41.300 de diciembre. Estas subas de precios entre julio y diciembre van desde el 119 al 130%.
Hay que recordar que los precios hasta fines del año pasado mantenían un retraso, tanto por el congelamiento de los impuestos (que ahora se están actualizando en base a la inflación) y también por un tope al precio interno del barril de petróleo, que se está desregulando paulatinamente, para alinear los valores de los surtidores argentinos con el precio internacional.