Un volcán cerca de la Patagonia aumentó su actividad y decretaron alerta amarilla

En las últimas semanas hubo una gran cantidad de pequeños movimientos sísmicos en la zona cordillerana, que generaron un aumento de la actividad volcánica en la región del sudoeste de Mendoza, el noroeste de Neuquén y la región de frontera con Chile. Como consecuencia, desde el Complejo Volcánico Laguna del Maule emitieron un alerta amarillo. 

Fue por intermedio de un comunicado desde donde el Observatorio Argentino de Vigilancia Volcánica (OAVV) señalaron: “Los movimientos registrados mediante la red binacional de monitoreo volcánico instrumental ha mostrado una evolución a lo largo de los últimos días, con el registro de más de 10.000 eventos de tipo volcano-tectónica, asociados al fracturamiento de roca al interior del volcán”.

La actividad sísmica se produjo sobre el sector chileno del complejo volcánico, que es monitoreado por ambos países (en 2021 se instaló en suelo argentino una red de monitoreo).

“La cantidad de eventos y el desarrollo de esta sismicidad es el de mayor duración registrado desde el inicio del monitoreo instrumental en este volcán en 2012, las magnitudes calculadas hasta el momento han sido de baja energía y localizadas sobre este sector específico”, agregaron en el comunicado oficial.

Este complejo volcánico comprende una amplia zona de frontera, ubicada mayormente del lado de Chile, pero que tiene puntos de control del lado argentino, tanto en la zona norte de Neuquén, como en el departamento de Malargüe. Es una de las zonas volcánicas de Argentina mejor monitoreadas.

Según medios mendocinos, el monitoreo duró todo el fin de semana, y el lunes, ante la continuidad de los eventos decidieron, en conjunto con las autoridades de Chile, elevar el alerta a amarillo.

Sebastián García, director del OAVV, afirmó al diario El Sol, que esta medida implica "prestar más atención, observar de manera más detenida lo que sucede en este volcán y se deja de prestar atención a otros volcanes. El volcán está por encima de su nivel de base, está haciendo algo anormal, pero no significa que vaya a hacer una erupción inminente". Si la actividad sísmica disminuye o finaliza, el alerta vuelve a nivel verde.

García explicó que, por el momento, se descarta la posibilidad de una erupción, pero señaló que la actividad del volcán se encuentra por encima de su nivel de base. Además, el experto aclaró que “no hay que alarmarse, pero sí mantenerse informado y seguir los protocolos indicados por las autoridades en el caso de que se eleve el nivel de alerta”.

Este complejo cubre unos 500 kilómetros cuadrados y está formado por conos, volcanes de escudo, domos y flujos de lava.

Estudios geológicos identificaron al menos 130 centros eruptivos individuales, de los cuales han sido emanados más de 170 kilómetros cúbicos de material. En particular, se han reconocido un total de 36 lavas y domos post-glaciales de composiciones riolíticas y riodacíticas, emitidos desde 24 centros eruptivos diferentes.