Una joven argentina dejó a su hijo de dos años en un albergue y desapareció por una semana
La mamá del menor se llama Naiara Durán, su familia viajó a La Paz, Bolivia, para rescatar al niño y ayudar en la búsqueda. Investigan los motivos de su ausencia.
Se había cumplido una semana de que una mujer argentina oriunda de San Pedro, partido de Buenos Aires, de 23 años de edad, había desaparecido en la ciudad de La Paz, Bolivia, y fue encontrada ayer lunes por la tarde.
La joven se encontraba viajando desde octubre de 2020 con su hijo de dos años. Hace siete días, dejó al niño en un albergue y recién hace pocas horas se pudieron reencontrar.
Durán se suele comunicar con su familia frecuentemente vía Facebook, hace días no tenían comunicación y una mujer llamada Gladys alarmó a sus allegados y les avisó que la joven se había ido del hostel sin su hijo, pero estaba acompañaba de un hombre de Rosario. Mientras tanto, el niño había quedado al cuidado de las autoridades del país vecino, que lo resguardaron en una guardería.
Después de la comunicación telefónica, la madre, un tío y el marido de la abuela de la joven iniciaron el viaje hacia Bolivia para recuperar al menor y colaborar en la búsqueda. El pasado lunes, en horas del mediodía, el niño ya se había reencontrado con su familia. Aún deben tramitar la recuperación formal del hijo de Durán para poder regresar a la Argentina.
Su familia aclaró que ya había contado con atención y que esta sería otra recaída. También advirtió la importancia de contar con espacios de contención y rehabilitación integral para personas con este tipo de patologías.
Desde Rosario, la joven viajó con un hombre identificado como Mario. Ambos fueron a Córdoba, Salta, y Jujuy. Desde La Quiaca cruzaron a Villazón, en Bolivia. De ahí se dirigieron a La Paz, destino donde desapareció.
Según la familia de la chica, ambos atraviesan problemas de adicciones. La abuela de la joven le dijo al medio La Opinión que él vendió el celular de Durán para poder comprar drogas. “No hay una persona con la que haya hablado que no me haya dicho que es una porquería de tipo, que usa a las mujeres”, aseguró Elsa Romero, la abuela de la joven, en diálogo con el medio local.
Un mes atrás, Durán estuvo dos semanas sin contactarse con sus allegados en la Argentina. Para el cumpleaños del menor, en julio pasado, la familia le había hecho llegar dinero para la torta, que el chico habría tomado para la compra de sustancias, según indicó el medio de San Pedro.
En aquel momento, ella tranquilizó a sus familiares y les dijo que estaba bien. Sin embargo, todo cambió cuando, hace una semana, le comentó a su tía sus intenciones de regresar a San Pedro a causa de una pelea con su compañero de viaje. Así, le pidió que la fueran a buscar a La Quiaca, en Jujuy. Esa fue la última comunicación con la familia, que despertó la preocupación.
“Una mujer se conectó conmigo y me dijo que estaba fumando pasta base y que estaba pesando 30 kilos, que la vayamos a buscar”, comentó, angustiada, la abuela de Durán.
“Hay que entender que estamos hablando de una chica que tiene un problema de adicciones, que hay que ayudarla, tiene que haber un centro donde se puedan tratar estos problemas porque Naiara es una de las miles de chicas que están así”, comentaron algunos parientes.