Una tormenta mortal se abate sobre Nueva York
El temporal llegó con ráfagas de vientos de hasta 100 km por hora. Hubo cortes de luz, árboles y techos arrancados y al menos dos muertos.
Una cinta transportadora de tormentas eléctricas acompañadas por ráfagas de viento avanzó sobre la región de Nueva York, complicando el servicio de trenes, cortando la luz a decenas de miles de vecinos y matando a dos personas por la caída de árboles.
Los meteorólogos dijeron que las tormentas entre las 4 y las 6 de la tarde del martes produjeron daños extensos debido al viento desde el norte del estado de Nueva York, a través de la área metropolitana, pasando por Long Island y hasta Connecticut.
Las tormentas estuvieron acompañas con ráfagas de viento de entre 80 y casi 100 km por hora, que derribaron árboles y líneas de electricidad y dejaron multitudes sin luz.
Sólo en Connecticut, más de 100 mil usuarios quedaron sin energía, según Eversource. La empresa New York State Electric & Gas reportó que más de 70 mil usuarios se quedaron sin luz cerca de las 9 de la noche.
Los muertos
En Dutchess County, unos 130 km al norte de Manhattan, las autoridades emitieron una orden de emergencia restringiendo el tránsito en algunas áreas.
Un poco más al sur de allí en Newburgh, la policía informó que un árbol había caído sobre un vehículo, atrapando una nena de 11 años, que luego murió en el hospital.
Y en Twitter, el alcalde de Danbury (Connecticut) Mark Boughton confirmó los informes de que un hombre había muerto luego de que un árbol cayera sobre su camioneta.
“Muy pocas áreas quedaron indemnes", dijo el martes a la noche Bill Goodman, un meteorólogo del Servicio Nacional del Clima.
Goodman explicó que también hubo informes sobre vientos arrancando el techo de un torre de agua en el Alto Manhattan y la voladura de un techo en un hotel en Newburgh. Otros reportes indicaron que cayó granizo del tamaño de pelotas de baseball en el noreste de Pennsylvania y en Clermont, Nueva York.
El mal clima causó un caos en la estación Grand Central en Manhattan, en la noche del martes.
Alrededor de las 5.30 de la tarde, el servicio de trenes y subtes Metro-North Commuter Railroad anunció en Twitter que el servicio en las lineas Hudson, Harlem y New Haven habían sido suspendidas y advertía a los pasajeros que evitaran la terminal.
Al servio de Tránsito de Nueva Jersey no le fue mejor.
Más de una hora después, la estación Grand Central aún estaba llena de pasajeros. Permanecieron apretados como sardinas en lata alrededor del mítico reloj bajo el cielo abovedado y su constelación. Nadie podía ir a ningún lado.
En cambio, muchos optaron por sacarse selfies para documentar la escena surrealista.
Forrest West, 27, se quedó sentado al borde del balcón, tratando de escapar de la multitud en el piso de la estación, frente a él.
“No puedo con esto,” dijo West, mientras esperaba por un tren para ir a su casa en Stamford, Connecticut. “Esta gente parecen miles de hormigas".
Cada tanto, un aviso feliz rompía la monotonía: un tren se acercaba. Y la gente respondía avanzando entre la multitud hacia su andén a paso ligero.
Hacia el final del día, el servicio se había restablecido parcialmente en todas las líneas aunque persistían las demoras.
Mientras, las tormentas se trasladaron hacia el sudeste de la región, según informó Jack Boston, un meteorólogo de AccuWeather. La lluvia sin embargo continuará, dijo.