Una fábrica abandonada se convirtió en "El Patio de Rawson"
En una esquina céntrica de la ciudad capital de Chubut, funcionó hace más de 40 años la fábrica de Pesca "Flor de Lis". El predio, de una gran extensión, estuvo abandonado durante las últimas décadas con un gran deterioro en sus instalaciones e incluso riesgos para la seguridad pública. Hace 2 meses, reabrió como "El Patio de Rawson" por iniciativa de un grupo de jóvenes.
En diálogo con ADNSUR, Rafael Necul recordó que “todo surgió cuando nos pusimos de acuerdo con nuestro amigo Josuá Díaz para restaurar este lugar que estuvo abandonado durante varias décadas. Buscábamos la idea de tener el primer Patio de Comidas de la ciudad e innovar. Por suerte, la gente confió en nosotros”.
“Hace 2 meses, estamos trabajando. La gente lo adoptó como ‘El Patio de Rawson’. Nosotros buscamos un lugar para la familia”, puntualizó.
“Se trabaja con los ‘carros de comidas’. Gracias a ellos, pudimos crear un canal económico y una rueda que empezó a girar durante todos los horarios del día. Hay 50 stands disponibles para que los feriantes tengan un lugar y puedan ofrecer sus productos tranquilamente”, señaló.
“El lugar está abierto toda la semana y los carros de comidas funcionan con el reparto a domicilio. Durante el mediodía, hay mucha visita de los empleados públicos y de los alumnos y alumnas de las escuelas cercanas a quienes se les ofrece un ‘menú estudiantil’ que incluye la comida, la bebida y una fruta a $500”, destacó.
¿Cómo fue el ingreso a un predio abandonado durante mucho tiempo?
“Ingresar a este lugar fue un trabajo a pulmón. Lo pudimos definir de una manera privada, tenemos un contrato con el dueño del lugar quien accedió a que podamos limpiar el terreno, restaurarlo y darle mucha actividad. Somos un grupo de jóvenes que apuntamos a darle algo a la ciudad. Específicamente, los sábados y domingos se hacen ‘eventos a beneficio’ o ‘actos solidarios”, precisó.
“Los dueños de los carros de comidas tienen que pagar $ 15000 por mes. Además, tienen que cumplir con los requisitos del Emratur por disponer de ese tipo de puestos de comidas y aportar a la Municipalidad de Rawson por los impuestos correspondientes”, indicó.
“Los próximos pasos son mantener el crecimiento, realizar eventos especiales los fines de semana y el espacio está abierto a los vecinos que quieran llevar adelante sus propios eventos. De a poco, la gente se acostumbra a una actividad diferentes en la ciudad”, concluyó Rafael Necul, uno de los impulsores de “El Patio de Rawson”.