El vuelo del soldado estadounidense Brooks Lindsey se retrasó en el peor momento porque no pudo estar presente en la sala de partos durante el nacimiento de su hija. Pero, gracias a la tecnología, pudo presenciarlo a kilómetros de distancia.

Lindsey tenía que viajar a la ciudad de Jackson, estado de Misisipi, desde su base en Fort Bliss, estado de Texas. Pero cuando su hija estaba a punto de nacer, él todavía se encontraba en el Aeropuerto Internacional Dallas-Fort Worth.

Entonces, la suegra del soldado desde la sala de partos inició una llamada vía FaceTime. Entre lágrimas, sentado en el suelo de la terminal, Lindsey vio cómo su mujer daba a luz.

En un momento, el hombre dijo que debía colgar la llamada para abordar su vuelo, pero su médico gritó desde el otro lado de la pantalla: "¡No le permitas abordar el vuelo! ¡Está aquí! ¡Está aquí!". Lindsey se quedó y vio el parto en vivo.

La emocionante escena fue registrada por la usuaria Tracy Dover, que estaba en el mismo vuelo que el soldado. Le sacó una foto al hombre emocionado y la subió a Facebook, donde rápidamente se volvió viral. "Lloraba y nuestros corazones se rompían. Todos le dimos espacio. Cuando escuchamos llorar al bebé, todos nos regocijamos por él", escribió Dover.

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