Fue al médico y le dijeron que tenía un virus estomacal, pero el verdadero diagnóstico fue devastador
"Entré en estado de shock e incredulidad. Después de una noche inquieta y sin poder comer ni beber nada debido a la cirugía pendiente, me desperté el 25 de abril y me llevaron al quirófano. Estaba llorando y extremadamente temerosa de lo desconocido", reveló la mujer sobre las sensaciones que le generó conocer lo que realmente ocuría.
Una mujer australiana vivió momentos dramáticos relacionados a su salud, luego de haber sido diagnosticada con un grave cáncer pese a que inicialmente le habían dicho que padecía un virus estomacal.
Se trata de Gemma Farquhar, quien un día comenzó a sufrir dolores intestinales y vómitos, por lo que decidió ir al médico para saber qué era lo que le ocurría.
Si bien en un inicio los doctores diagnosticaron un problema leve en su estómago, lo cual dejó tranquila a la protagonista de la historia, el verdadero padecimiento no se conoció sino hasta abril de 2020, cuando se enteró que tenía un cáncer de intestino en etapa cuatro que la dejaba con tan solo 14% de probabilidades de supervivencia.
"Antes de mi diagnóstico a principios de enero, comí una pizza el viernes por la noche con la familia", contó en un inicio la joven madre de dos hijos respecto a su situación. "Unas horas después de comerla, mi barriga estaba retumbando fuera de control. A las 02:00 AM necesitaba vaciar mis intestinos y al mismo tiempo comencé a vomitar violentamente, vomité hasta que me quedé sin pedazos de pizza en el cuerpo", recordó.
Esta situación, dijo, se volvió a repetir días después, por lo que entendió que no era un virus normal el que la afectaba.
"Me puse en contacto con el médico local y tenía una cita. Le avisé de mis síntomas y simplemente dijo que no había nada de qué preocuparse, que era solo un problema estomacal", contó.
A las pocas semanas un nuevo episodio generó preocupación. Tras salir a caminar con una amiga comenzó a tener calambres en el estómago, y durante la noche su apetito disminuyó y empezó a tener vómitos nuevamente.
Fue ante este episodio que decidió realizarse nuevos estudios urgentes, que repercutieron en una llamada de su médico pidiéndole que acudiera rápidamente a su consultorio.
"Entré en estado de shock e incredulidad. Después de una noche inquieta y sin poder comer ni beber nada debido a la cirugía pendiente, me desperté el 25 de abril y me llevaron al quirófano. Estaba llorando y extremadamente temerosa de lo desconocido", expresó la mujer en relación a los momentos posteriores a recibir el diagnóstico.
Si bien inicialmente se le comunicó que tenía un cáncer en estado 3, durante la quimioterapia los profesionales de la salud detectaron que el mismo se había extendido y ya se encontraba en su etapa 4.
Sin embargo, y afortunadamente, pudo sobrevivir y hoy decidió contar su historia. "El propósito de esto es contar mi historia de cosas que he aprendido sobre la resiliencia, conocer tu cuerpo y ser tu propio defensor, rasgos que puedes usar en tu vida diaria. Me apasiona crear conciencia, pero para hacer eso, necesitamos educar y contar nuestras historias", concluyó.