Lo barato sale caro: se operó las mejillas, su cara se llenó de ampollas y quedó irreconocible
Por una cuestión de "inseguridad", la joven modelo de 26 años acudió a una clinica para realizar un cambio estético que terminó de la peor manera.
Para cualquier persona someterse a una operación quirúrgica ya sea por un retoque estético puede generar miedo e inseguridad por el resultado final. Puede salir bien o mal, y en este caso la segunda opción le sucedió a una modelo.
Se trata de Mali Kanjanaphuping, quien intentó someterse a una operación para mejorar su sonrisa. Según relató a través de sus redes sociales, la joven de 26 años se operó la cara y regresó a su casa con la felicidad tatuada en su rostro. Pero aquello no duraría por mucho tiempo.
Con el correr de las horas la mitad de su cara estaba inusualmente roja. Creyendo que se trataba de una reacción secundaria completamente normal, optó por confiar en la clínica que la había operado. Pero no era lo que creyó.
La modelo quedó irreconocible por el parche rojo hinchado alrededor de la nariz y la mejilla derecha. Aceite y pus rezuman de las dolorosas ampollas parecidas a granos.
“Mi problema era que tengo mejillas profundas y cuando sonrío, no me siento segura. Así que me inyecté para que mi rostro se llene más”, mencionó TN.
“Antes del Covid-19, fui a cierta clínica durante aproximadamente un año. Pero después de un tiempo, descubrí que ella era solo una enfermera y no una doctora. Pero como me inyectaron varias veces antes, pensé que estaría bien, ya que nunca había habido un error. Pensé que ella tenía suficiente conocimiento”.
Costo y tratamiento
La clínica le cobró $100 dólares por inyección, pero Mali, cliente de mucho tiempo, recibió un descuento, lo que significa que pagó tan solo $78 dólares. “El precio suena aterrador, ¿verdad? Estaba cegada por lo barato que era y pensé que no había nada de qué preocuparse”, señaló.
“Las sensaciones que tuve en mi cuerpo después de la inyección fueron extrañas. Menos de una hora después de la inyección tenía un hematoma. Estaba todo en el lado derecho de mi cara. En mi nariz y a lo largo de donde están las heridas. Mi nariz goteaba solo del lado derecho. Pensé que tal vez lo había hecho bruscamente”, agregó.
Algunos días después, Mali decidió ir a ver a un dermatólogo. El médico dijo: “En el momento en que vi la cara de Mali, supe que los rellenos habían bloqueado el vaso sanguíneo. Es peligroso porque la inyección impidió que la sangre fluyera y el relleno podría haber ido a sus ojos”.
La joven recibió una consulta detallada, se le inyectó una solución para disolver el relleno y se le proporcionó antiséptico y antibióticos. Su rostro mejoró pero deberá usar maquillaje de para tapar algunos rastros que le quedarán de por vida.