(ADNSUR) - Un hombre estadounidense fue víctima de una repudiable maniobra de su empleador, luego de que tras renunciar a su trabajo recibiera el pago de su liquidación final en miles de monedas totalmente aceitadas y engrasadas.
Andreas Flaten, quien trabajaba para la compañía A OK Walker Autoworks, había decidido dejar su empleo avisando con dos semanas de anticipación por considerar que había un "clima tóxico" en el mismo.
Tras dar aviso a su jefe, aguardó más de tres semanas a que se le pagara su indemnización final, y tras no recibirla recurrió al Departamento de Trabajo del Estado de Georgia. A los días, recibió en la puerta de su casa una carretilla repleta de monedas sucias, con una carta que decía "Fuck You".
"Me llevará horas y horas limpiar este dinero para que se pueda gastar. Definitivamente, no es justo en absoluto", aseguró el hombre.