Un mensaje en el celular habría disparado la furia de la mujer que atropelló y mató a su novio
Empiezan a tomar fuerza las versiones de los testigos que la vieron salir con el auto y pasarlo por arriba.
SAN RAFAEL - Tras la trágica muerte de Genaro Fortunato (25), un reconocido rugbier mendocino, se agrava la situación judicial de su novia, Julieta Silva (30), a quien la acusan de atropellarlo y arrollarlo con su auto a la salida de un boliche en San Rafael, en el sur provincial, durante la madrugada del sábado, tal como informó LA NACION.
El futuro procesal de la mujer se complica con el correr de las horas, ya que empiezan a tomar fuerza las versiones de los testigos, sobre todo de un cuidacoche, que aseguran que la chica, tras discutir con el deportista dentro del bar La Mona, salió corriendo hacia su vehículo Fiat Idea, lo encendió y emprendió la marcha con Fortunato subido al capot, quien cayó al piso, en la intersección de las calles El Chañaral y Ruta 143, en el distrito Las Paredes. Ante este escenario, Silva continuó la marcha, pero se detuvo repentinamente, hizo una "U" y decidió avanzar otra vez sobre el cuerpo del joven, a quien le aplastó el cráneo.
De esta manera, el caso sigue bajo la calificación de "averiguación homicidio" aunque no se descarta que en las próximas horas Silva, propietaria de un reconocido local de ropa de la ciudad sureña, sea imputada por homicidio culposo o doloso, teniendo en cuenta que pudo haber tenido finalmente la intención de asesinar al chico, con quien mantenía una relación de noviazgo desde comienzo de año. Asimismo, se aguardan los resultados de la autopsia para determinar cómo falleció Fortunato.
Lo que está cada vez más en claro es que ambos tuvieron una fuerte discusión dentro del local bailable, luego de que Genaro recibiera en su celular el mensaje de otra mujer, que podría estar vinculado a una supuesta paternidad. Silva, molesta, decidió abandonar el boliche, y en medio de la furia, se desencadenó la tragedia. Conocidos de ambos aseguran que la mujer es madre de dos hijos y que el año pasado se separó del padre de los pequeños. Asimismo, es la propietaria de un local de indumentaria llamado "Verde Limón". Por su parte, allegados a Silva aseguran que el joven desde hacía un tiempo la venía "molestando y acosando" en continuar con la relación, que se había transformado en "enfermiza".