Ya están los votos en Legislatura para eliminar las PASO y habilitar una nueva reelección a los intendentes: cuál es el texto de ambas reformas
Hace tiempo dijimos que los dos temas iban a integrar la agenda legislativa. Ahora, anticipamos que ya está el acuerdo para que sean aprobados, y además, adelantamos la redacción de lo que se va a votar. Chubut no tendrá más elecciones primarias y 24 intendentes y jefes comunales ahora tendrán la posibilidad de presentarse un período más. La lectura política de quiénes son los principales ganadores.
Como una carne que se fue cocinando a fuego lento y que ya llegó a su punto justo, con el tiempo necesario para que no esté cruda ni pasada, así se fue poniendo todo en condiciones durante estos meses para asegurar el éxito de las reformas electorales que ahora están listas para ser tratadas por la Legislatura.
Los lectores de esta columna lo saben, porque se lo venimos anticipando desde el año pasado: dijimos que en 2022 se iba preparar el terreno electoral para lo que viene, con dos puntos centrales, como la eliminación de las PASO y la reelección de los intendentes. Y es así porque ambas leyes interesan prácticamente a todos los bloques que hoy existen, y en cambio, sus detractores no tienen ningún representante en la Cámara.
Lo primero que tenemos que aclarar es que hay una diferencia: el proyecto para habilitar una reelección más de los intendentes, lo va a enviar el gobernador Mariano Arcioni, por pedido expreso de los jefes comunales y porque hay respaldo de las fuerzas políticas. El proyecto para eliminar las PASO lo están trabajando los diputados, y va a salir desde adentro mismo de la Legislatura.
Pero lo importante, más allá de quien lo presente, es que están los votos necesarios, ya que se trata de dos leyes que necesitan mayoría simple: en un caso, modifica la ley orgánica de partidos políticos; en el otro, la ex ley de corporaciones municipales. Son temas que están vinculados a qué y cómo se vota, pero no están dentro de una ley electoral ya que, como se sabe, de acuerdo a la Constitución necesitaría una mayoría especial de 22 votos.
¿Quiénes van a estar respaldando estas reformas? Con seguridad, todos los diputados del oficialismo, que responden a Mariano Arcioni y Ricardo Sastre, así como los de Chubut Unido –su presidenta Leila Lloyd Jones lo anticipó esta semana- y el bloque de la UCR. Eso sumaría unos 18 votos, que -si se agregan los diputados Carlos Eliceche y Sebastián López- podrían llegar a ser 20.
¿Qué van a hacer los 6 diputados del bloque del PJ/Frente de Todos? Siempre es una incógnita, porque juegan a las escondidas hasta último momento. Les cuesta dar una definición tajante hasta el final y suelen evaluar el impacto en la gente. La modificación de los intendentes no les mueve la aguja en gran medida, y respecto a las PASO, no había gran convencimiento tiempo atrás, pero ahora su referente, el intendente comodorense Juan Pablo Luque, ha dicho públicamente que deben ser eliminadas, por lo que es probable que terminen levantando la mano.
La modificación de las reglas electorales siempre es analizada desde el tamiz de la conveniencia de cada sector, y si ambas reformas van a avanzar, es porque los actuales miembros de la Cámara de Diputados evalúan que los favorece y puede perjudicar a sus rivales, por más argumentos democráticos que se quieran exponer.
Luego vanos a explicar nuestra lectura de quién sería el principal perdedor con estos cambios, pero antes, vamos a repasar en cada caso lo que está en carpeta para ser tratado en las semanas que se aproximan.
LAS PASO
El borrador que están trabajando los diputados apunta a modificar el artículo 66° de la Ley XII N° 9, el cual quedaría redactado de la siguiente manera: “Para la nominación de candidatos a cargos públicos electivos los Partidos podrán optar por incluir en sus Cartas Orgánicas cualquier sistema de elección de candidatos que contemple la representación de las minorías. El procedimiento deberá incluir: a) Convocatoria previa con un plazo no menor de treinta días. b) Publicación de la convocatoria en el Boletín Oficial y en un medio gráfico de circulación provincial. c) Clara descripción de la candidatura de que se trate. d) Plazo de presentación de listas.”
De este modo, se daría marcha atrás con el mecanismo de Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) para la selección de candidatos partidarios a cargos electivos provinciales y municipales, que había quedado establecido en la Ley Orgánica de Partidos Políticos sancionada en diciembre de 2014, durante la gestión del ex gobernador Martín Buzzi, y trabajada por el entonces ministro de Gobierno, Javier Touriñán.
Reconocen los actuales legisladores que aquella incorporación tenía la intención de profundizar la intensidad de la democracia chubutense, poniendo a disposición del elector una mayor oferta electoral e intentando asimismo mejorar las condiciones de participación dentro de los Partidos Políticos.
Pero admiten que, con el paso del tiempo, desde algunos sectores se cuestionó la obligatoriedad que el sistema impone en los ciudadanos exigiéndoles involucrarse en la vida interna de un Partido Político al que no decidieron voluntariamente afiliarse. Por ello, sostienen que “la idea de la obligatoriedad se encontraría involucrada con una imposición ilegítima a la libertad de las personas, estableciendo condiciones de tipo perfeccionistas.
Asimismo, argumentan que las PASO “fueron cuestionadas por considerarlas un avance ilegítimo frente al derecho de asociación, involucrado en la conformación de un Partido Político”, que -entre sus prerrogativas- tiene “la facultad para seleccionar las ofertas electorales propuestas a la comunidad”.
También mencionan “razones de tipo económico”, referidas al “alto costo involucrado en la puesta en funcionamiento de las Primarias Abiertas que fue advertido desde distintos sectores que consideraron inoportuna la reforma en momentos donde la economía provincial comenzaba a prender luces de alarma”.
Uno de los argumentos centrales será que, en la práctica, las PASO “no han demostrado mejorar los niveles de participación, ni permitir siquiera que un mayor número de propuestas se encuentren a disposición del elector”, ya que la mayoría de los partidos “prefieren llegar a la elección con un solo candidato a las Primarias con el objeto de fortalecerse en dicha instancia con miras a la elección general”.
Referido a lo anterior, se alude que “las Primarias son tomadas como una especie de gran encuesta por las principales fuerzas políticas”, las que, a partir de un buen resultado en dicha instancia, intentarán cautivar el denominado “voto útil”, protagonista excluyente de los últimos procesos electorales.
Por ello, concluyen que “sin una mejor democracia, sin una mayor oferta electoral, sin una mayor participación popular, y sin el fortalecimiento de los Partidos Políticos que era esperado, parece imprescindible volver a resguardar la libertad individual, la libertad de asociación y la austeridad económica”.
Recién repasamos algunos de los principales argumentos en contra de las PASO, que serán la base para la reforma legislativa. Ahora, veamos cuál es la propuesta que circula en torno al mandato de los intendentes.
INTENDENTES
Respecto a la modificación de la ley que en 2016 puso un freno a las relecciones de los presidentes de las comunas rurales y de los intendentes de los municipios sin Carta Orgánica, había dos alternativas que fueron planteadas en su momento por los intendentes a la Legislatura y que fueron reiteradas al gobernador en la reunión del martes 30 de agosto en Playa Unión.
Una de las propuestas postulaba directamente eliminar toda restricción, volviendo a las reelecciones indefinidas, tal como han manifestado públicamente a favor el vicegobernador Ricardo Sastre y el intendente de Paso de Indios, Mario Pichiñán, quien lleva cinco mandatos seguidos al frente del municipio.
La otra postura –que es la que finalmente va a ser aprobada- es la que considera que la reforma de la Ley de Corporaciones Municipales se hizo en el momento en que muchos intendentes ya estaban en funciones, y que debe considerarse su primer mandato no el del año 2015, sino el de 2019. De este modo, se los habilitaría a una reelección consecutiva más, en 2023.
Por ello, el borrador que tiene en carpeta el gobierno, repite de manera idéntica el artículo 8° de la Ley XVI N° 46 (antes Ley N° 3098): “el Intendente y los Concejales serán elegidos directamente por el cuerpo Electoral de la Corporación Municipal, durarán cuatro años en sus funciones. El Intendente puede ser reelecto por un segundo mandato consecutivo. Para poder aspirar a una nueva elección deberá dejar transcurrir un período completo de cuatro años. Esta limitante no es aplicable a los Concejales”.
Pero el agregado que se hace a continuación es clave: “para los Intendentes electos en el año 2015 se considerará que el actual período es el primer mandato”. Lo mismo se hará con la Ley Orgánica de Comunas Rurales (XVI N° 93), que en su artículo 5°, establece que el presidente de la Comuna Rural “será electo directamente por el pueblo, acompañado por un Vicepresidente, los cuales durarán 4 años en sus funciones y podrán ser reelegidos únicamente por un nuevo período consecutivo”.
Con esos agregados, hay 14 intendentes y 10 jefes comunales que quedarían habilitados para volver a presentarse. De los municipios, tres de ellos son de Juntos por el Cambio, como Sergio Ongarato de Esquel, Luis Juncos de Rada Tilly y Miguel Gómez de Gobernador Costa. También hay dos justicialistas, que son Miguel López en Alto Río Senguer y Dante Bowen, de Dolavon.
La gran mayoría de estos casos, son intendentes que pertenecen a la alianza gobernante Chubut al Frente, que suman en total 9: Rubén Calpanchay, de José de San Martín, Ariel Molina, de Corcovado; Marcelo Limarieri, de Gualjaina; Horacio Pichiñán, de Paso de Indios; Silvio Boudargham, de Cholila; Antonio Reato, de Epuyén; Oscar Currilén, de El Maitén; Jorge Seitune, de Tecka; Claudia Loyola de Camarones.
Hay casos paradigmáticos, como el de Seitune que lleva 6 períodos (camino a los 24 años seguidos) en Tecka, Pichiñán que encadena 5 mandatos consecutivos en Paso de Indios, y Antonio Reato, con cuatro períodos al hilo en Epuyén.
Respecto a las comunas rurales, que tuvieron por primera vez su elección popular de autoridades en 2015, hay 10 casos de presidentes que fueron reelectos en 2019, y que podrían volver a presentarse con esta reforma. Son Leonardo Bowman en Telsen; Miguel Ancamil en Lagunita Salada; Beatriz Roa en Cerro Centinela; Víctor Candia en Paso del Sapo; Alejandro González en Aldea Epulef; Raúl Santander en Colán Conhué; Nilda Tolosa en Las Plumas; Marcos Pruessing en Aldea Apeleg; Sergio Núñez en Carrenleufú y Jorge Villegas en la comuna rural de Ricardo Rojas.
TERRENO FÉRTIL
Si se repasa dónde está el apoyo político a estas reformas, que hicimos al comienzo de nuestro análisis, no es difícil detectar quién no está a favor: hablamos del actual senador de Juntos por el Cambio y presidente del PRO, Ignacio Torres. El último triunfador de las elecciones en Chubut quiere dejar todo como está, pero no tiene ningún representante en la Cámara. Peor aún, la Legislatura está plagada de enemigos políticos, e incluso algunos están ideando alguna que otra reforma que podría llegar a ponerle más trabas aún.
En lo que respecta al mandato consecutivo de los intendentes, Torres –junto a las dirigentes radicales Jaqueline Caminoa y Edith Terenzi- ha salido a declarar que no debe tocarse aquella ley de 2016 que puso límites a los jefes comunales, que claro está, le traería un dolor de cabeza en Esquel, donde Sergio Ongarato quedaría habilitado a presentarse y competir contra el actual diputado Matías Taccetta.
Y sobre las PASO, el sistema de internas abiertas le dio muy buen resultado a Torres en 2019 y 2021 contra las listas de los radicales, ya que luego traccionó todos esos votos en las generales. Pero si las primarias son eliminadas, volvería el sistema de elecciones internas tradicionales, que no es obligatorio para toda la ciudadanía, sino que es más cerrado, y donde la dirigencia del radicalismo se mueve como pez en el agua, ya que son especialistas.
En ese escenario, por más que se trate de internas abiertas, un mano a mano entre una lista de la UCR contra otra de Torres dejaría un final más abierto, reconocido esto de un lado y del otro de la ecuación de Juntos por el Cambio. Por algo las reformas serán apoyadas no sólo por los diputados radicales, sino por sus rivales, que buscarán meter fichas en la interna de una fuerza electoral que estará muy bien posicionada para 2023.
Nadie actúa de manera inocente en política, y si explicamos que ahora se da terreno fértil para que todo esto avance, es que los actores de la Legislatura coinciden en sus intereses: todos creen que es más lo que ganan que lo pierden, y entienden que más allá de algún chisporroteo que pueda generar en el microclima, la sociedad va a ver con buenos ojos que se eliminen turnos electorales y que se ahorre en elecciones costosísimas.
Ya descartada la idea de una nueva Ley de Lemas, barajada en su momento con algunas figuras del gobierno nacional pero impracticable por la mayoría especial que necesita y por ser considerada impopular, está todo dado para habilitar la reelección de 24 intendentes y para eliminar las PASO. Queda resolver el tema de la fecha de la convocatoria provincial, algo que ya hemos analizado más de una vez. Pero esa es otra historia, que depende del gobernador Mariano Arcioni, y que recién se va a terminar de resolver hacia fin de año.