Stella Maris del Papa, la atleta que rompió la barrera por la igualdad de derechos en el atletismo argentino
“Yo pensé que cada 42K me iban a hacer la misma historia, y la verdad que no”, dice Stella Maris del Papa, una de las primeras mujeres en correr una maratón oficial en Argentina. Lo hizo en el año 1981, haciéndole frente a los estereotipos y en la lucha por la igualdad. Este fin de semana la atleta llegó a Comodoro para estar presente en la 57° edición de la Corrida Internacional de Crónica, que este año unificó distancias; mujeres y varones hicieron el mismo recorrido y recibieron los mismos premios. En su visita dialogó con PDC y contó lo que significó ese momento y los cambios trascendentales que se dieron con el correr de los años en la disciplina.
(PASTA DE CAMPEÓN / ADNSUR) - La llegada de Stella Maris del Papa a Comodoro Rivadavia, siendo la primera mujer en correr una maratón oficial en la Argentina. se dio en el marco de la 57° edición de la Corrida Internacional de Crónica. Fue en un año histórico para la competencia; por primera vez se unificaron las distancias entre mujeres y varones, sellando la igualdad de género.
La historia se remonta a los orígenes del atletismo, donde las mujeres no tenían permitido participar en muchas pruebas deportivas; porque eran consideradas más débiles y frágiles. Stella Maris del Papa rompió esa barrera y fue en busca de la igualdad entre mujeres y hombres, logrando correr la primera maratón oficial en 1981 en Argentina, algo que hasta entonces desconocía.
Pero no fue fácil derribar esas barreras. Previo a esa primera competencia oficial, Stella Maris fue a correr a las “Fiestas Mayas”, donde vivió un desagradable momento. “Se corrían primero las mujeres y en otros lugar los hombres, se notaba la diferencia. Yo me pongo adelante de todo no sabía lo que era una competencia, cuando se larga me dieron un codazo al estómago y mientras corría me dolía. Pensaba esto no es para mí, no es femenino”, recordó en diálogo con PDC.
Pero lejos de tomar una decisión determinante, Stella Maris fue por más, se puso un objetivo y lo cumplió. “En el 81 le digo a mis amigos que quería correr un maratón oficial con número, me llevan a Ezeiza y cuando me presente me dijeron 'no, las mujeres corren hasta 21'. Yo les dije: 'señores yo voy a correr los 42 sin número'. Cuando vieron que estaba decidida me trajeron un papel y un lápiz y tuve que firmar que me hacía responsable si me pasaba algo. Yo pensé que cada 42 me iban a hacer la misma historia, y la verdad que no”, señaló la atleta”.
Stella Maris recuerda que el trascurso de la competencia sucedió un hecho puntual. “Ese mismo día cuando terminaba la primer vuelta, faltaban 200 metros, alcance a un señor, estaba muy cansado cuando me vio se apuró para que no lo pase. El terminaba a los 21, yo despacito seguí, me espero en la llegada y me dijo: 'quiero que me disculpes no sabía que las mujeres corrían 42'”, valoró Stella.
SU HISTORIA
Mujer decidida que superó una infancia y adolescencia dura, Stella Maris comenzó a correr incentivada por su mamá. Eran los años 80, tiempos difíciles para todos y todas, contó Stella Maris. No solo la mujer era excluida, los hombre igual eran juzgados por correr en las calles. “A los hombres lo mandaban a laburar, cuando pasaba un camión o un coche. Y a nosotras las mujeres no mandaban a lavar los platos”, señaló.
Por eso, en tiempos en que felizmente ha crecido de modo exponencial la práctica del deporte por mujeres, para Stella Maris, no duda en afirmar que hay un camino ganado. “Hubo muchos cambios, las mujeres hoy son muy competitivas, cambio mucho la ropa, hay más información, hay entrenadores y entrenadoras. Eso es lo lindo que hay muchas mujeres y me encanta. La mujer se fue integrando al correr, me encanta verlas”, indicó.
MUJER, MAMÁ Y ATLETA
Por supuesto su gran trayectoria en el atletismo también la combinó con su vida cotidiana. Es que ser madre significa un cambio radical en la vida personal y profesional de muchas mujeres, y ser madre deportista de élite impone además otros desafío, tal como cuenta.
“Cuando quede embarazada tuve unos embarazos maravillosos, trabajé hasta el día anterior, entrené hasta el séptimo mes. Tuve chicos grandes y estuve preocupada porque decían que las mamás no daban de mamar”, recuerda
Stella Maris pudo conjugar esa combinación de ser mamá y deportista, haciéndole frente a las situaciones que se le prestaban. “Cuando empecé a dar de mamar a la hora ya estaba perdiendo leche porque al correr se me activaba mucho. Me tenía que volver a casa porque me chorreaba hasta las zapatillas”, cuenta, demostrando lo difícil que a veces puede ser para la mujer, y recuerda una linda anécdota con el pediatra. “Un día llevo al bebé al pediatra y hace un provechito, el médico me dice no lo limpies, agarrá un papel y me pregunta que le daba. Le respondí 'la teta solamente', y sorprendido me pregunta '¿qué actividad hacés? Es cremosa tú leche. Descubrió en ese momento que le daba lecha batida después de correr y lo llenaba más”, señaló.
"CORRER TE DA SALUD Y ENERGÍA
El atletismo fue y es parte de la vida de Stella Maris del Papa, momentos que reflejó en su libro "Maratonista de Alma". Ella se pone metas y proyectos a cumplir. Así llevo adelante una trayectoria de más de 45 años de competencias con 77 maratones corridas de 42K y más de 250 de 21K.
Con 70 años cumplidos va por más y considera que “está bueno tener proyectos, aun siendo abuela".
"Tener proyectos en el deporte y tener un buen compañero como el que tengo es fundamental. Todos y todas podemos hacerlo, hay que experimentarlo. Van a ver que uno se siente distinto cuando hace algo por uno mismo. No hay secretos, si vos te ponés metas, lográs algo maravilloso: el sentirse bien. Esto es lo que te da salud y alegría. El correr te da salud y alegría”, sentenció demostrando que siempre se puede seguir soñando.