Minería: proyecciones para 2025 y los desafíos para atraer grandes inversiones
Con 62 proyectos en carpeta, la minería argentina se posiciona como un sector estratégico para la economía nacional. El cobre y el litio lideran las oportunidades, pero su desarrollo depende de millonarias inversiones y de un entorno favorable.
La minería se perfila como uno de los motores económicos más prometedores en Argentina. Según datos de la Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM), actualmente hay 62 proyectos en distintas etapas de desarrollo, que en conjunto podrían requerir inversiones superiores a los USD 31.000 millones.
El litio y el cobre encabezan la lista de minerales con mayor protagonismo, tanto por su potencial de exportación como por la demanda creciente en mercados internacionales. Mientras que el litio aporta dinamismo en el corto plazo, el cobre podría consolidarse como la principal fuente de ingresos del sector a mediano y largo plazo.
Litio, presente y futuro inmediato
Actualmente, el litio lidera en cantidad de proyectos, con 31 iniciativas en diferentes etapas. De estas, cuatro ya están en producción, generando exportaciones anuales estimadas en USD 850 millones, aunque afectadas por la caída del precio internacional, que se redujo un 70% en el último año.
Para los próximos años, se espera una recuperación en los precios del litio, con valores que podrían estabilizarse en torno a los USD 12.500 por tonelada de carbonato de litio equivalente hacia finales de la década. Además, seis proyectos están en construcción, cinco en etapa de factibilidad y dos en prefactibilidad.
Entre las inversiones destacadas bajo el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), figura el proyecto Hombre Muerto Oeste en Catamarca, liderado por la australiana Galan Lithium, con un desembolso inicial de USD 200 millones, y Sal de Oro, de la surcoreana Posco, con más de USD 1.000 millones, que incluye la construcción de plantas de extracción y procesamiento de litio.
El cobre, clave para el largo plazo
El cobre se presenta como el mineral de mayor impacto económico en el sector, con 18 proyectos en análisis. Sin embargo, los costos asociados son significativamente más altos: cada proyecto requiere, en promedio, USD 3.200 millones, superando ampliamente la inversión promedio de los proyectos de litio.
Seis proyectos de cobre ya dimensionados demandarían USD 19.500 millones de inversión y podrían generar exportaciones anuales de entre USD 8.000 y USD 9.000 millones, representando un incremento del 10% en las exportaciones totales del país.
Desafíos y oportunidades
El principal reto para materializar estos proyectos es garantizar un entorno estable para las inversiones, incluyendo marcos regulatorios claros, infraestructura adecuada y acceso a financiamiento. Asimismo, la construcción de rutas, tendidos eléctricos y sistemas de transporte ferroviario será esencial para viabilizar el desarrollo de las áreas productivas, particularmente en las provincias cordilleranas.
Si las primeras decisiones finales de inversión (FID) se confirman en 2025, la minería argentina podría consolidarse como un pilar estratégico para la economía nacional, impulsando exportaciones, empleo y desarrollo en regiones clave del país.
Con información de revista Forbes, redactado y editado por un periodista de adnsur.