Tecpetrol avanza con su propio proyecto de GNL en la costa atlántica: ¿Se reaviva el debate entre Río Negro y Bahía Blanca?
La empresa energética del grupo Techint proyecta la instalación de una planta terrestre de licuefacción de gas, para la exportación del insumo de Vaca Muerta.
Tecpetrol, el brazo energético del Grupo Techint, avanza en el desarrollo de un proyecto de planta de gas natural licuado (GNL) en la costa atlántica argentina. La compañía, que opera en el bloque Fortín de Piedra de Vaca Muerta, se encuentra en la etapa de ingeniería de diseño de una planta modular que podría producir inicialmente 4 millones de toneladas por año (MTPA), con posibilidades de ampliar la capacidad a 20 o 30 MTPA si se incorporan nuevos socios a la iniciativa.
Si bien la ciudad de Bahía Blanca, en la provincia de Buenos Aires, parece ser la ubicación predilecta para la planta, la empresa no descarta radicar su proyecto en la costa de Río Negro. Esta iniciativa se distingue de otras en Argentina por su enfoque en una instalación terrestre, en contraste con las plantas flotantes de licuefacción que evalúan Pan American Energy (PAE) e YPF en sus respectivos proyectos de GNL.
Tecpetrol planea financiar inicialmente el proyecto con inversión propia, pero está abierto a la participación de otros actores en una configuración tipo "parque industrial", lo que permitiría sumar nuevos módulos a medida que se decida incrementar la capacidad de la planta. Esto facilitaría el uso compartido de infraestructura crítica como ductos, puertos y suministros de energía.
El proyecto se enmarca en un contexto global de creciente demanda de GNL, impulsado por la transición energética y la necesidad de diversificar fuentes de energía en mercados internacionales. Tecpetrol espera tener lista la ingeniería del proyecto para mediados de 2025, y la decisión final de inversión podría tomarse en el corto plazo.
La iniciativa es parte de un debate más amplio sobre cómo escalar la producción de shale gas en Vaca Muerta, que alcanzó niveles históricos en 2024. El desafío radica en cómo aprovechar el potencial del yacimiento y transformarlo en exportaciones de GNL, en un momento donde las tensiones políticas y económicas locales, sumadas a la volatilidad geopolítica, impactan en los precios del gas a nivel global.
Con información de Mejor Energía, redactado por un periodista de adnsur.