En el actual panorama energético global, tres empresas se destacan por ofrecer dividendos en torno 5% en dólares, generando interés entre los inversores que buscan estabilidad en un entorno volátil. TotalEnergies, BP y Eni no solo muestran rendimientos atractivos, sino que también presentan perspectivas a considerar en función de la evolución del consumo de energía y las dinámicas geopolíticas.

Respecto de la volatilidad del mercado energético, la revista Forbes asegura que “la década de 2020 es alcista para la energía”. Sin embargo, asegura que “estamos apenas en la mitad de un ciclo de ‘choques y repuntes’”. Según las estimaciones de la Administración de Información Energética, el consumo mundial de petróleo y combustibles líquidos debería seguir creciendo en el corto plazo.

Tres acciones energéticas con buenos dividendos y expectativas a futuro

Los gigantes de la energía que rinden entre un 4,5% y un 6,6% y se negocian por tan solo la mitad de sus ingresos:

TotalEnergies (TTE)
La multinacional francesa TotalEnergies ofrece un rendimiento de dividendo del 4,5%. Desde el cambio de nombre en 2021, la empresa consolidó su posición en diversas áreas, como el petróleo, el gas natural y las energías renovables. A pesar de una leve subvaloración en comparación con el sector energético en general, la compañía mostró estabilidad en sus operaciones y una gestión eficiente de su deuda, reduciendo su deuda neta a menos de USD 14.000 millones en el último trimestre.

BP (BP)
La británica BP, con un rendimiento de dividendo del 5,6%, logró una recuperación significativa desde los impactos de la pandemia. Aunque la compañía sufrió una reducción en su dividendo en 2020, BP mostró signos de recuperación, duplicando sus ingresos entre 2020 y 2023 y aumentando gradualmente su dividendo. Sin embargo, la empresa enfrenta desafíos relacionados con su alto apalancamiento, lo que podría afectar su estabilidad en escenarios adversos.

Eni (E)
Eni, el gigante energético italiano, ofrece el dividendo más alto del grupo, con un rendimiento del 6,6%. La empresa adoptó un enfoque más agresivo en la distribución de dividendos, aumentando su objetivo de distribución de flujo de caja operativo. Eni mostró una recuperación sólida desde la pandemia, superando los precios previos a la crisis. Sin embargo, su fuerte exposición a la exploración y producción la hace particularmente sensible a las fluctuaciones de los precios de la energía.

El contexto actual del mercado de petróleo y gas, influenciado por factores como la desaceleración en las ventas de vehículos eléctricos y la reposición de la reserva estratégica de petróleo de Estados Unidos, presenta un escenario de posibles vientos favorables para estas empresas. Con el precio del crudo West Texas Intermediate rondando los USD 75 por barril y expectativas de crecimiento en el consumo mundial de petróleo y combustibles líquidos, los inversores en energía podrían encontrar en estas acciones una oportunidad para maximizar sus rendimientos en dividendos.

Con información de la revista Forbes, redactado por un periodista de ADNSUR.

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