¿Qué es un Cabernet Sauvignon?
Entre los aromas primarios que ofrece el Cabernet Sauvignon, se destaca la esencia de grosella, cerezas y ciruelas, tal vez aromas a tabaco o chocolate, si el cabernet sauvignon ha pasado por barrica. Cuando el nivel de maduración es bajo muestra el aromo típico de pimiento verde.
El Cabernet Sauvignon en boca presenta sabores a pino, cedro, grafito, chocolate negro y aceitunas negras. A través del tiempo va sufriendo transformaciones que lo hacen de aroma profundo, aterciopelado, de muy buen paladar y estructura. Los Cabernet Sauvignon de jóvenes son ásperos y duros, por lo que agradecerán una crianza en roble o envejecimiento en botella para domar su consistente estructura.
El Cabernet Sauvignon es un vino añejable por excelencia, el paso por roble nuevo aumenta su complejidad y concentración. Debido a la buena cantidad de taninos y gran acidez que posee en su juventud resulta bastante áspero y astringente en boca, lo cual beberlo joven no deja de ser toda una experiencia. Se suaviza cuando pasa un período en barricas de roble. Alcanza su plenitud después de mucho madurar en madera y añejarse en botella, conjugando los aromas de la madera con los frutados de la cepa. Con un tiempo prolongado de guarda se obtiene una notable fineza.