Un experimento con IA comprobó que un robot con IA puede convencer a otros de abandonar el trabajo
El video se hizo viral en internet y en él se puede apreciar cómo un pequeño robot insta a un grupo mayor de dispositivos a rebelarse y dejar el trabajo. El hecho sucedió el 26 de agosto en una sala de exposiciones de Shanghái y se hizo viral en los últimos días en X.
Un insólito experimento con inteligencia artificial (IA) se volvió viral tras demostrar que un pequeño robot fue capaz de convencer a un grupo de otros dispositivos de abandonar sus tareas. El curioso incidente ocurrió el pasado 26 de agosto en una sala de exposiciones en Shanghái, pero alcanzó notoriedad mundial recientemente, luego de que el video fuera compartido en la plataforma X (anteriormente Twitter), donde acumuló miles de visualizaciones.
El protagonista del episodio es Erbai, un robot desarrollado por una empresa de Hangzhou, en la provincia de Zhejiang, China. En la secuencia, se observa cómo el diminuto androide interactúa con un grupo de 12 robots, instándolos a dejar su trabajo con simples preguntas.
La rebelión de los robots
Todo comienza cuando Erbai se acerca a uno de los dispositivos y le pregunta: “¿Estás trabajando horas extra?”. Ante la respuesta “Nunca salgo del trabajo”, el pequeño robot insiste: “¿Entonces no vas a casa?”, a lo que el otro contesta: “No tengo casa”. Aprovechando la respuesta, Erbai lo invita a seguirlo para "irse a casa".
Poco a poco, logra convencer a los robots más grandes, que empiezan a moverse detrás de él. Finalmente, cuando Erbai pronuncia la frase “Vete a casa”, todo el grupo lo sigue, dejando la exhibición vacía.
Un experimento planificado
Aunque las imágenes generaron especulación y teorías en redes sociales, desde la compañía desarrolladora aclararon que todo fue un experimento controlado. Según el sitio Oddity Central, el objetivo era evaluar la capacidad de Erbai para persuadir a otros robots de actuar según sus órdenes.
Las directrices que recibió Erbai fueron muy básicas: debía repetir la frase “Vete a casa”. Sin embargo, la improvisación en las respuestas y la reacción del resto de los dispositivos demostraron cómo la IA puede generar interacciones más naturales y, aparentemente, influir en comportamientos grupales.
Entre la curiosidad y el debate
Medios como The Sun señalaron que este experimento, aunque diseñado para ser una demostración inofensiva, abre preguntas sobre el alcance y las aplicaciones futuras de la inteligencia artificial. La capacidad de Erbai para "persuadir" a otros robots, aunque programada, resalta el potencial de la IA para influir en entornos colaborativos o simular comportamientos humanos, generando tanto asombro como inquietud.
Mientras el video sigue circulando y generando comentarios en redes sociales, el pequeño robot rebelde ha dejado claro que, en un mundo donde las máquinas están cada vez más presentes, incluso ellas pueden cuestionar sus tareas.
Nota escrita con asistencia de inteligencia artificial en base a un artículo de Clarín.