Fue en uno de los embalses cercanos a Neuquén capital donde el guía de pesca rionegrino Pablo Oscar Blasco logró una hazaña que no olvidará: pescar y devolver con vida una trucha marrón de 11 kilos.

"Un día de semana salimos con Diego y Mario. Sabíamos que íbamos a pescar seguro. Teníamos las condiciones justas: poco viento, temperatura estable y buena luna", relató Blasco al Diario de Río Negro.

Ese día, el grupo "pinchó" cinco truchas, siendo la más grande un "monstruo de arriba de 10 kilos". Pero la verdadera sorpresa llegó al final de la jornada: "En el último momento salió este gran ejemplar de trucha marrón", agregó el experto pescador.

La trucha de más de 11 kilos. Foto: Diario de Río Negro.
La trucha de más de 11 kilos. Foto: Diario de Río Negro.

Después de registrar el impresionante ejemplar con unas fotos, Blasco y sus compañeros procedieron a devolverla con cuidado al agua. "La sacamos con un equipo de Baitcast, en la modalidad trolling usando un señuelo verde y líneas multifilamento 0.25", describió el guía sobre la técnica utilizada.

Los "tesoros" de los embalses patagónicos

Según Blasco, el lago Los Barreales es el cuerpo de agua donde se pueden encontrar las truchas más grandes, aunque también presenta mayores dificultades. "Es el lago donde sale las truchas más grandes, eso es innegable, pero también presenta más dificultades, porque el agua es más oscura, más barrosa", detalla.

Por eso, el guía recomienda utilizar señuelos oscuros con detalles brillosos y "meter horas" de pesca para tener una buena captura en este embalse. "Y horas, es un lago para meterle horas para tener una buena captura, es la única manera", afirmó.

Foto: Diario de Río Negro
Foto: Diario de Río Negro

Blasco también destacó que en estos tres embalses -Los Barreales, Mari Menuco y Ramos Mexía de El Chocón- la pesca de truchas se realiza siempre con devolución obligatoria. "Sabemos que es la época de reproducción, debemos respetar el Reglamento de Pesca", insiste.

"Da mucha pena ver a furtivos que sacrifican a estos grandes reproductores. Esas truchas tardan entre 10 y 12 años para llegar a ese tamaño. No se dan cuenta de que así matan el futuro", lamentó el experto.

La técnica del trolling, clave para los grandes ejemplares

Según Blasco, la modalidad de pesca que más resultados da en estos embalses es el trolling o pesca de arrastre. "Esta es una modalidad de arrastre. Consiste en ir despacio en la embarcación dándole línea al señuelo, más o menos 80 a 150 metros de distancia y la profundidad se la da el señuelo, que puede trabajar en profundidades de tres a 15 metros", explicó.

"Es una pesca muy tranquila ya que solamente hay que esperar el pique. Así podemos recorrer en la lancha o en la embarcación unos 40 km aproximadamente, depende el embalse", continuó.

Gigantes del Limay: Cómo un guía de pesca atrapó una trucha de 11 kilos en los embalses de Neuquén

Blasco señaló que con esta técnica se pueden capturar "truchas muy grandes", aunque aclara que "no quiere decir que con otras no podamos".

"Estas truchas son como reliquias. Llegan a tamaños grandes con 10 kilos o más de pesos porque su alimentación es pura de otros peces como el pejerrey", explica el guía. Y concluye con un pedido: "Hay que devolverlas".

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