Se acomoda el dólar, se disparan los precios

Por más que el mercado aún permanezca sensible a los vaivenes coyunturales, desde el miércoles las diversas cotizaciones comenzaron a retroceder. 

Sin embargo, las remarcaciones, hechas por cuestiones precautorias, no trazaron el mismo recorrido, y las consultoras privadas aseguran que se verá reflejado en la inflación de abril.

Diversos rubros sufrieron el impacto de la suba de precios de listas en menos de una semana, como por ejemplo la indumentaria, la construcción o la siderurgia. Pero ninguno tiene injerencia tan marcada a nivel nacional como el sector de los alimentos, que ya acumulaba otros preocupantes aumentos en abril.

Pasadas las tres primeras semanas del mes, la consultora LCG indicó que el índice de precios de Alimentos y Bebidas era de 7,6%. 

Luego de la corrida cambiaria, durante la que la brecha superó el 120%, el porcentaje amenaza ser mayor. De ser así, abril marcaría la cuarta suba consecutiva del sector por encima del IPC general. 

Para Fernando Savore, presidente la Federación de Almaceneros de Buenos Aires, el aumento del blue “es uno más de tantos”, y agrega que les preocupa “comprar sin saber a qué precio tendrán que reponer”.

Los mecanismos de cobertura frente a la suba de los distintos tipos de cambio (financieros y blue) fueron varios. 

Este medio consultó con diversos proveedores y rescató algunos de ellos: pronto envío de nuevas listas con remarcaciones de entre un 10% y 20%, interrupción temporal de las ventas, o bien operaciones a remito abierto.

Para Sergio Massa, ministro de economía, los aumentos “no son por cuestiones de macroeconomía, sino por avivadas” ya que “las importaciones se hacen al dólar oficial”. 

Sin embargo, no es la mirada que sostienen economistas como Fausto Spotorno, de la consultora Ferreres & Asociados, quién resaltó en declaraciones radiales que la inflación de abril “va a raspar el 8%"; la consultora Analytica espera una variación similar “por expectativas”.

Es que las restricciones al tipo de cambio oficial orientan a los importadores a diversificar el acceso al dólar y obtenerlos a través del mercado financiero (CCL y MEP), generando así una tendencia a remarcar precios en base a sus cotizaciones, $441 y $436 respectivamente.

Así las cosas, el jueves Massa convocó a empresarios y sindicatos a firmar un acuerdo de precios por 90 días. 

Las reuniones con los actores comenzaron ayer y fueron encabezadas por el secretario de Comercio Interior, Matías Tombolini. Participaron grandes entidades como Mondelez, CCU y Makro. El funcionario massista le dejó un saludo al ministro deEeconomía por su cumpleaños en Instagram, y él, bromeando (quizás no tanto), respondió: “Gracias Mati, laburá este finde los acuerdos o te liquido”.

Desde Comercio afirmaron a este medio que efectivamente “hubo varios encuentros, presenciales y por zoom durante todo el día”. 

Igualmente, la estrategia de consenso es repetida y ha demostrado tener resultados significativos en términos de estabilización de precios. 

Desde el sector sindical, temen que el acuerdo permita que “solo queden sin movimientos los salarios y los empresarios incumplan, como siempre.” 

Una fuente ligada al sector de los panificados explicó a ADNSur que a este ritmo inflacionario, “los acuerdos se firman hoy y se deshacen mañana” porque la aceleración de los precios “lo hace insostenible”, y terminan generando “una salida abrupta”. 

Sin embargo, la consultora Nielsen resalta que la brecha de precios entre un supermercado (donde funciona Precios Justos) y un almacén, puede superar el 100% en productos de consumo masivo. La remarcación, según el informe, responde a la estrategia de las empresas de ajustar las listas en los comercios donde el Estado no fiscaliza.

A su vez, el BCRA decidió elevar la tasa de política monetaria en 1000 puntos básicos, llevando la tasa de interés nominal anual de las Leliq a 91% y lo mismo para los plazos fijos hasta 30 millones de pesos. La estrategia para contener la inflación “es lo que indica cualquier manual cuando hay una corrida cambiaria, pero llega tarde y no sé si es suficiente”, indicó el economista Sergio Chouza. 

Pero su colega Juan Ignacio Paolicchi señaló en Twitter: “Si el BCRA sube la tasa 10% (de 81% a 91%), en un año se emitirían $18 billones. Lo que implica que alcanzaría con 4 meses para duplicar la base monetaria actual (cantidad de pesos en circulación), sólo de intereses. O, dicho de otra forma, en un año tendríamos 3,5 bases nuevas.”