Qué significa que PECOM se quede con las áreas de YPF en Chubut
Todavía restan etapas de no menor importancia en el proceso, pero la elección de PECOM por parte de YPF para transferirle las cuatro áreas que dejará de operar en Chubut es un indicador importante con relación a lo que puede esperarse en la cuenca San Jorge, de cara a anuncios recientes y a la perspectiva de la recuperación terciaria en la región.
El nombre de Pérez Companc en Chubut no es nuevo, ya que aún se recuerda su actividad como operadora del área Pampa del Castillo, área a la que accedió a partir de contratos con la empresa YPF cuando ésta era íntegramente estatal. Un edificio a la entrada del centro de la ciudad, incluso, recuerda el nombre de la empresa, donde hoy funcionan dependencias del Ministerio Público Fiscal.
Remontando la historia, la primera vinculación de Carlos Pérez Companc con la industria petrolera fue en 1968, para el área Entre Lomas, en la provincia de Neuquén. Era la primera vez que la compañía ingresaba a la fase productiva en un yacimiento de hidrocarburos, desde la exploración hasta a producción de petróleo y gas. Años más tarde, extendería su actividad hasta transformarse, décadas atrás, en la segunda productora de petróleo y gas del país.
En 1998, por ejemplo, el anuario de la actividad petrolera reflejaba que en las áreas chubutenses de Pampa del Castillo y La Guitarra, la operadora Pérez Companc había producido un total de 471.000 metros cúbicos de petróleo, equivalente a casi 3 millones de barriles de crudo.
Posteriormente, esas áreas fueron vendidas a Enap Sipetrol, hasta que años atrás, en 2018, fueron traspasadas a Capsa-Capex.
EL REGRESO A LA ACTIVIDAD
Luego de una década y media de diversificación en otros rubros, el grupo PECOM volvió a acercarse al sector hidrocarburífero en 2015, a partir de la compra de la firma Skanska, la misma a la que le había vendido SADE en 1999.
El nombre de la compañía volvió resonar fuerte en Comodoro Rivadavia, en noviembre de 2018, con la compra de la compañía de servicios Bolland, a un valor del orden de los 120 millones de dólares. Ya en ese momento, se anunció desde la dirección de la firma el objetivo de crecer en este sector, a partir de servicios que ya venía prestando a YPF.
Precisamente, tal como advirtió ADNSUR semanas atrás, uno de los hitos mencionados en aquel entonces fue que la compañía estaba operando una de las plantas de recuperación terciaria para YPF en El Trébol.
Con más de 5.000 empleados y un volumen de facturación anual superior a los 800 millones de dólares, la compañía fue recientemente distinguida, por segundo año consecutivo, como la mejor empleadora en la industria energética, según el ‘Randstad Employer Brand Research 2024’. A su vez, PECOM ascendió al quinto lugar en el Top 10 de las empresas más atractivas para trabajar en Argentina.
En el Golfo San Jorge, puntualmente, son 1.400 trabajadores, de los cuales 850 se encuentran en Chubut.
LO QUE VIENE EN EL GOLFO
El desafío, una vez que concluya un proceso que aún debe ser aprobado por el gobierno de Chubut, a través de su Ministerio de Hidrocarburos, es recuperar volúmenes de producción en las áreas objeto del traspaso, que se vieron fuertemente impactadas por el temporal de nieve del mes de junio, pero que además vienen mostrando una curva de declino natural.
A partir de las técnicas de recuperación terciaria y la posibilidad de que los aranceles de importación se eliminen para los polímeros y otros insumos utilizados en ese tipo de operación, se abre una oportunidad para que las áreas maduras recobren vigor productivo, sobre todo teniendo en cuenta que el crudo de la cuenca San Jorge es todavía requerido por las refinerías del país para mezclarlo con el petróleo más liviano proveniente de Vaca Muerta.
Todavía es prematuro para conocer planes de inversión, pero habrá que ver cuál es el equilibrio entre esa forma de extracción y la perforación de nuevos pozos, que es la actividad que demanda mano de obra en forma más intensiva.
Es probable que en esa definición, vinculada a la búsqueda de “optimización y eficiencia” de la que se habla en la industria, que apunta a la reducción de costos, se juegue también el impacto para el mercado laboral del sector.