¿Cuál es la escalofriante hipótesis sobre el joven que encontraron muerto en un reconocido frigorífico de la Patagonia?

Alan Riquelme conocía bien su trabajo. Con solo 24 años, acumulaba cinco años de experiencia en el frigorífico Moño Azul en Villa Regina. Pero el domingo, lo que debía ser una rutina diaria se transformó en tragedia. Alan recibió la orden de abrir una cámara de atmósfera controlada, pero por motivos que nadie entiende, ingresó antes de que fuera seguro.

Según Pablo Dcristofaro, referente del gremio STIHMPRA, el procedimiento es claro: “No podés entrar a la cámara hasta al menos 12 horas después de abrirla”. Sin embargo, Alan retiró las trabas de la puerta principal y luego entró por una puerta secundaria, exponiéndose al ambiente de bajo oxígeno y altas concentraciones de dióxido de carbono. En pocos pasos, el joven cayó inconsciente y no pudo salir con vida.

Una tragedia descubierta por su propio suegro

Alan estaba solo en la planta frigorífica cuando recibió la orden de abrir la cámara, cerca de las 11:00 de la mañana. Su cuerpo fue encontrado cinco horas después por su suegro, quien también trabaja en el frigorífico. “La verdad, no se sabe qué pasó. Tal vez pensó que era otra cámara con un tratamiento diferente”, reflexionó Dcristofaro en diálogo con Radio Noventa de Villa Regina.

La investigación está a cargo del fiscal Agustín Bianchi, quien ordenó pericias en la planta. Personal de Criminalística y un médico policial trabajaron en el lugar, buscando determinar las causas exactas del incidente.

Similitudes con una tragedia en España

El caso de Alan recuerda un trágico accidente ocurrido en 2004 en Zaragoza, España, donde un joven becario murió asfixiado en una cámara de atmósfera controlada. En esa ocasión, la atmósfera contenía solo un 2% de oxígeno, lo que provocó que el joven perdiera el conocimiento en cuestión de minutos.