A 8 años del día en que Comodoro se paralizó por el asesinato de un remisero
El crimen de Fernando Andrés Schmidt derivó en un bloqueo total de la ciudad por parte de los trabajadores del volante, quienes pedían justicia y mayor seguridad para aquellos que debían cumplir su labor recorriendo las calles de la ciudad petrolera.
La mañana del 29 de enero de 2017, la ciudad de Comodoro Rivadavia amaneció totalmente paralizada.
Un centenar de remiseros, junto con colectiveros y taxistas, se ubicaron en las principales calles céntricas, así como en los ingresos y egresos a la ciudad, para reclamar justicia por un remisero asesinado a puñaladas mientras trabajaba.
La imagen aún es nítida; ya pasaron 8 años de ese día, donde el dolor, la indignación y la bronca de los trabajadores de volante se hicieron sentir ante un nuevo caso de inseguridad que tenía como víctima a un trabajador.
La víctima era Fernando Andrés Schmidt, de 35 años, quien tenía dos hijos y trabajaba como chofer en la agencia de Remis Aleisa.
Ese 29 de enero, Fernando se encontraba esperando, al igual que otros compañeros, en la agencia el pedido de un viaje. Hasta el lugar, cerca de las 4 de la mañana, llegó un joven que posteriormente sería identificado como Miguel Ángel Sotelo, de 18 años.
Sus compañeros decidieron pasar el viaje porque algo no les daba confianza de este joven. Sin embargo, Fernando no dudó y tomó el viaje en su Toyota Etios.
Cuando llegaron a Los Álamos y Huergo, del barrio La Floresta, Fernando recibió al menos 20 puñaladas en distintas partes del cuerpo.
Las principales hipótesis que se manejaron en ese momento eran que el asesino no tenía dinero para pagar y discutió con él, o que intentó robarle la recaudación de la jornada.
Como pudo, el remisero gravemente herido manejó su auto unos metros y alcanzó a pedir por radio ayuda. Sus compañeros llegaron inmediatamente a la zona y fueron los mismos que lo trasladaron al hospital, donde finalmente se confirmó su muerte producto de un shock hemorrágico irreversible.
El 26 de diciembre de 2018, el Superior Tribunal de Justicia Provincial confirmó las sentencias condenatorias en contra de Miguel Ángel Sotelo por el delito de “homicidio simple” en calidad de “autor”, así como también la pena de 17 años de prisión en su contra.
El condenado fue trasladado a la alcaidía de Trelew para cumplir su pena. Sin embargo, en 2019, logró fugarse de la unidad penitenciaria donde cumplía la pena por la muerte del remisero. Sin embargo, fue recapturado horas después y volvió a estar detrás de las rejas.
