Caso Expósito Moreno: se conocerá la pena para Solís y Kesen
Él podría pasar entre 8 y 33 años en prisión y ella, hasta 10.
COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) – Este martes se conocerá finalmente la pena para Sergio Solís y Nadia Kesen, a quienes la justicia consideró penalmente responsables del asesinato del español Domingo Expósito Moreno ocurrido el 25 de junio de 2014. Los jueces bajaron la calificación a homicidio simple agravado por el uso de arma y Solís podría recibir entre 8 y 33 años de prisión mientras que Kesen –ex pareja de Expósito Moreno, con quien se disputaba la tenencia de una menor-, podría pasar tras las rejas entre 5 y 10 años.
La pena se conocería después de las 9:30.
Se espera gran presencia de familiares y amigos de la víctima en el edificio de tribunales de Avenida Portugal y Monseñor D´Andrea.
La Fiscalía había acusado a Solís por homicidio doblemente agravado por arma de fuego y cometido con alevosía, que tiene prevista la prisión perpetua pero tras el planteo de la defensa de que estaba mal calificada ya que no se daban presupuestos para aplicar la agravante, el tribunal recalificó por homicidio simpe agravado por uso de arma de fuego. En este caso, la pena es de 10 años y 8 meses hasta 33 años y 4 meses de prisión.
Nadia Kesen fue declarada penalmente responsable de “Homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego en calidad de partícipe secundaria”.
La defensora oficial de Sergio Solís, Lucía Pettinari, anticipó la apelación de la decisión del tribunal. Consideró que el argumento deja una “duda insuperable”. Además, afirmó que “hubo presión mediática” en la decisión de los jueces, que fue unánime. La pena se conocerá el martes próximo.
El 25 de junio de 2.014, la víctima llegaba junto a su pareja, Carolina Gayá, y el pequeño hijo de ésta. Al descender Domingo Expósito Moreno y según la principal testigo, enfrente se encontraba estacionado un automóvil Volkswagen Gol del cual -según la acusación fiscal ratificada por los jueces- descendió Sergio Solís del asiento del acompañante con un arma de fuego Magnum calibre 44, apuntó a Expósito Moreno y descargó sobre su humanidad al menos cinco disparos que provocaron su muerte casi en forma instantánea.
“Me mandé una cagada, si no me creés andá al Gimnasio Gatti”, comentaría el testigo González, uno de los primeros imputados en primera instancia y colaborador de Solís para deshacerse luego o al menos intentar hacer desaparecer el automóvil Gol.
La víctima había llegado a Comodoro desde España para recuperar a su pequeña hija de 6 años y llevarla de regreso a su país, tal como había dispuesto la justicia española.
