Condenaron al hijo de Pappo por violencia de género pero tendrá prisión domiciliaria: "Me estaba muriendo"
Luciano Napolitano recibió una condena a tres años y ocho meses de prisión por por haber "golpeado" y "amenazado" a su ex pareja. Según indicó sobre la decisión del juez, le dio la domiciliaria "para continuar mi vida porque adentro me estaba muriendo".
Luciano Napolitano, hijo del rockero Pappo, fue beneficiado con el arresto domiciliario, después de ser condenado a una pena de 3 años y 8 meses de cárcel por haber golpeado y amenazado a su expareja.
Napolitano, de 48 años, estuvo preso en un penal desde 2021, sin embargo, hace nueve meses fue beneficiado con una prisión domiciliaria que cumple en la casa de su madre, algo que se conoció en los últimos días por un posteo en las redes sociales.
Hace tres días, Luciano Napolitano - quien en prisión formó una banda de rock llamada "H6" junto a otros dos presos - subió a su perfil de Instagram un video tocando la guitarra eléctrica en una casa.
"Soy Rock canción de H6 y acá en mi casa afilando los solos de guitarra que hace meses que lo toco", escribió el hijo de Pappo en el posteo donde, además, hizo un largo listado de agradecimientos a algunos músicos, una actriz, un sacerdote, su abogado Roberto Casorla Yalet y "al juez" que, según explicó: "Me dio la domiciliaria para continuar mi vida porque adentro me estaba muriendo".
A raíz de esta publicación, fuentes judiciales confirmaron a Télam que desde diciembre pasado Napolitano fue beneficiado con la prisión domiciliaria con tobillera electrónica en la casa de su madre en Tigre y que, además, ya había sido condenado.
El 16 de diciembre de 2022, el juez en lo Correccional 4 de San Isidro, Juan Facundo Ocampo, dispuso "morigerar la medida de coerción" y hacer lugar a la "detención domiciliaria" del músico con el monitoreo de una pulsera electrónica.
Según la resolución, el juez se basó en "el estado de salud del detenido" - sufre Epoc, entre otros padecimientos-, y en que necesitaba una mejor atención que le que le brindaban en el penal, en que estuvo preso más de un año y medio. En el mismo proceso, el fiscal del juicio, Diego Callegari acordó con la defensa de Napolitano un juicio abreviado.
Cuando en marzo de 2021, el fiscal de Violencia de Género de Tigre, Pablo Menteguiaga, elevó la causa a juicio oral, se calculaba que por todos los delitos Napolitano podía llegar a ser condenado a una pena máxima de 19 años.
Sin embargo, el 28 de diciembre, es decir , doce días después de darle la domiciliaria, el mismo juez firmó la sentencia a 3 años y 8 meses de prisión por dos hechos de violencia de género contra su expareja, Mariel Oleiro, de 35 años.
Napolitano fue condenado como autor de los delitos de "lesiones leves agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género, amenazas, privación ilegal de la libertad agravada y tenencia de arma de guerra" por el primer episodio y "amenazas agravadas por el uso de armas", por el segundo, ambos en concurso real entre sí.
El juez dejó asentado en el fallo que, de acuerdo al cómputo de la pena, a Napolitano se le dará por cumplida su condena por estos hechos el 24 de enero de 2025.
El abogado Casorla Yalet informó a Télam que a pesar de haberse firmado el abreviado, él apeló el fallo al entender que la pena es excesiva, por lo que la condena aún no está firme y está siendo revisada por la Cámara de Apelaciones de San Isidro.
LAS ACUSACIONES POR VIOLENCIA DE GÉNERO
El hecho de violencia de género ocurrió la tarde del 24 de mayo de 2021, en la vivienda que el hijo del fallecido Norberto "Pappo" Napolitano compartía desde hacía cuatro años con su ahora expareja Oleiro, situada en Jujuy 3452, de la localidad de Benavídez, partido de Tigre.
De acuerdo a la denuncia de la víctima, todo se inició cuando le pidió a Napolitano las llaves de la camioneta para ir a comprar comida para sus mascotas y él comenzó a insultarla y agredirla físicamente, todo delante de dos de las hijas del condenado, de 7 y 13 años.
En su requerimiento de elevación a juicio, el fiscal Menteguiaga describió así el inicio de las agresiones: "Comenzó a hostigarla, humillarla y denigrarla para luego valiéndose de su condición de género tomarla del cuello apretándolo fuertemente hasta provocarle dificultad para respirar mientras le refería dichos amenazantes tales como "te voy a matar hija de puta, te voy a matar".
La denunciante contó que su pareja la tomó del cuello, que la agresión incluyó trompadas y patadas, que le apretó un ojo, que también la roció con alcohol, que en el patio de la casa intentó atropellarla con una camioneta Volkswagen Amarok y que la dejó encerrada sin poder salir de la propiedad y con la única posibilidad de estar en el quincho hasta que al día siguiente logró llamar al 911 y fue rescatada por la policía.
Napolitano fue detenido el 26 de mayo a la madrugada y en su vivienda se realizó un allanamiento en el que se secuestró el revólver .38 cargado, del cual no tiene permiso de tenencia ni portación.
Al ampliar su declaración, Oleiro denunció a Napolitano por un episodio previo -que terminó siendo el Hecho 2 de la imputación-, ocurrido el 21 de noviembre de 2020 en la casa de la madre del acusado, en la calle Juncal al 1300 de Tigre, donde hoy cumple la domiciliaria el condenado y, según dijo, le partió un cuadro por la cabeza y luego la amenazó de muerte colocándole en la cabeza el revólver calibre 38 que le secuestraron en su domicilio.
Al ser indagado, Napolitano dio una versión totalmente opuesta a la de su entonces novia, ya que dijo que se trató de una discusión de pareja, que ella fue quien lo agredió a él, que el arma de fuego que estaba en su casa la heredó hace 15 años de su papá y que la mujer conocía cómo salir de la propiedad, algo que se desacreditó en la causa con el testimonio de los policías que auxiliaron a la víctima.